Una investigación periodística acaba de sacar a la luz presuntos abusos sexuales cometidos por cientos de líderes espirituales y personal administrativo de la Iglesia Bautista del sur en Texas y otros estados de EEUU durante los últimos 20 años.

Al menos 380 líderes de la Iglesia Bautista del sur, entre pastores, ministros, maestros dominicales, diáconos y voluntarios, enfrentaron algún tipo de acusación por conducta sexual inapropiada que dejaron en las últimas dos décadas más de 700 víctimas, algunas de ellas de apenas 3 años. Así lo revela una investigación conjunta de los periódicos Houston Chronicle y San Antonio Express-News, los dos principales diarios de Texas, que en más de seis meses de pesquisas hallaron que unos 220 de los acusados fueron condenados por abuso sexual o negociaron acuerdos para reducir sus penas.

Algunos de ellos confesaron sus actos o renunciaron a sus cargos dentro de la congregación que, con 15 millones de miembros, es la más grande entre las protestantes de EEUU.

La gran mayoría de los acusados, según la investigación periodística, perteneció a iglesias de Texas y a la fecha existen más de 100 que, a pesar de figurar en el registro central de delincuentes sexuales, se mantienen en algún ministerio de la congregación. Muchas de las víctimas enfrentaron el rechazo de sus iglesias.