El Fórum Gastronómico cerró ayer las puertas de su cuarta edición en A Coruña con un nuevo récord de visitas: 24.000 personas pasaron por Expocoruña para conocer lo último del sector de la alimentación durante los tres días que duró el certamen, lo que supera la afluencia de la anterior edición, celebrada en 2017, según informaron ayer los directores del certamen, Pep Palau y Jaume von Arend. "Fueron tres días muy intensos en los que se han vuelto a superar una vez más los retos que nos habíamos planteado", señalaron.

Mil visitantes más que la edición anterior confirman la consolidación de esta feria en Galicia, tanto a nivel de atractivo turístico, como de superficie en cuanto a expositores -un 20 % más que la edición anterior- lo que constata la evolución del certamen más dimensionado y muy dinámico. "Los expositores se han puesto de largo con stands muy bonitos, con actividades en cada uno de ellos, lo que hace que esta feria no sea estática sino dinámica" y "diferente" a otras, "muy participativa" por parte de los visitantes, señala Von Arend.

Este año se vio un crecimiento especialmente importante en maquinaria y complementos de hostelería, como menaje, sectores que hasta ahora no estaban muy representados. Esta presencia muestra la evolución del Fórum hacia un sector cada vez más profesional, que es el objetivo de los organizadores.

Otro elemento que señalaron como diferenciador con respecto a otras ferias es la combinación entre el pequeño productor y la gran empresa, el "cuidado, mimo y especial atención que se le ha dado al pequeño productor, con voz y actividades en las que participar, como el Ágora". El café y la cerveza son sectores muy representados, con un espacio especial a la cerveza artesana y cerveceros que han venido desde diferentes puntos de España para presentar sus productos, junto con el Wine Circus en el que han participado pequeñas empresas del mundo del vino, con más de 200 referencias en el espacio del Fórum.

Von Arend agradeció el apoyo del sector gastronómico representado por la cocina y la hostelería gallegas, así como por las empresas que han colaborado con el Fórum una vez más. El resultado es una "satisfacción en general por este éxito" del Fórum, pionero en la celebración de congresos gastronómicos para profesionales, añade Palau.

Durante estos tres días pasaron por el Fórum 150 ponentes y se celebraron 90 actividades repartidas entre el auditorio, el taller, el Ágora, el Wine Circus y o el aula cultura cervecera. En cuanto al contenido, los organizadores destacaron el papel de la mujer, que sigue siendo un "reto y un objetivo" el normalizar en los eventos de gastronomía. En esta edición hubo varias ponencias sobre el papel de la mujer en la alta cocina.

En segundo lugar, citaron el protagonismo especial de los oficios que giran en torno a la cocina, como el de panadero, y finalmente destacaron el eje el Atlántico y el invitado este año, Canarias.

La siguiente cita del Fórum Gastronómico será en Barcelona los próximos 18 a 20 de noviembre, con una importante presencia gallega y tres espacios que representan la evolución e innovación como son la apuesta por los pequeños productores, el vino y el aula de cultura cervecera. "El reto y el compromiso es seguir innovando, no nos vamos a quedar quietos", asegura Pep Palau.

Diego Abal Sanmartín, de O Ratiño Pequeño de Bueu (Pontevedra), se alzó ayer con el primer premio en el Certamen de Mixología Maeloc que organizó esta marca de Hijos de Rivera y que buscaba premiar "la imaginación y la habilidad de los hosteleros a la hora de elaborar diferentes cócteles con sidra".

Abal se impuso a otros diez finalistas durante una competición celebrada en el stand de Hijos de Rivera del Fórum Gastronómico. Los diez aspirantes afrontaron diferentes pruebas en las que se les pidió que presentasen propuestas sorprendentes que contasen con alguna de las sidras Maeloc como ingrediente. Diego Abal ganó en la prueba final con su Pasión Maeloc, un cóctel en el que ha integrado la sidra de fresa Maeloc junto a vodka y orujo gallego. Como subcampeón se ha clasificado Pablo Gago, de Zicatela, en A Coruña.

La última jornada del Fórum contó también con una ponencia de Pepe Solla, el chef gallego con estrella Michelin en su local Casa Solla y que analizó el papel de la sala en los restaurantes. "La sala es la parte más humana dentro del restaurante, no es que los cocineros no sean humanos, pero la sala tiene que ser la más humana porque es la que mantiene el contacto con el cliente", indicó.