Galicia registró durante el año pasado 540 delitos de tipo sexual „lo que supone una media de una agresión y media al día„ y que experimenta un incremento del 17,6% en este tipo de hechos con respecto al año anterior, según los datos que avanza el Ministerio del Interior y que recoge la Secretaría Xeral de Igualdade en un informe sobre violencia sexual, realizado en exclusiva para esta temática a instancias de los grupos de la Cámara y que ayer entregó Susana López Abella al presidente del Parlamento, Miguel Santalices, junto con el informe ordinario sobre violencia de género.
En el conjunto de España se denunciaron el pasado año un total de 13.811 delitos contra la libertad sexual, lo que supone un 18% más que el año anterior. Un aumento casi similar al registrado en Galicia (+17,6%) y que López Abella lo atribuye a una mayor concienciación sobre este tipo de delitos y al hecho de que ahora se denuncien más las conductas relacionadas con la violencia sexual. Por ello apuesta por continuar educando a la sociedad en este ámbito.
Los datos cerrados del 2017 apuntan a que en España se produjeron 11.692 delitos de índole sexual, de los que la mayor parte fueron tipificados como abusos sexuales. En Galicia se registraron el 3,9% de estos delitos a nivel nacional: se denunciaron 459 agresiones sexuales, de las que el 80% se produjeron en A Coruña y en Pontevedra (180 y 182, respectivamente).
En cuanto a las víctimas, la secretaria xeral de Igualdade destacó una abrumadora mayoría de mujeres (el 84%) y expresó su preocupación por el incremento paulatino de menores como víctimas de violencia sexual. En concreto, informó de que los casos en los que la víctima del delito sexual es un menor pasaron del 40% en 2012 al 47% en 2017, lo que supone 4.542 personas, algo "tremendamente preocupante".
Además de incidir en la visibilización de la agresión sexual y en los recursos disponibles para víctimas, López Abella llamó la atención sobre la necesidad de mejorar la educación afectivo-sexual de los jóvenes, que, en la actualidad, inician de forma mayoritaria su conocimiento del sexo "a través de la pornografía".
En el informe de la Xunta se incluye también una encuesta estatal sobre violencia sexual, ante la que Susana López Abella se ha comprometido a desarrollar otra en ámbito gallego que permita perfilar con más precisión las políticas futuras. Esta encuesta revela que el 32% de los preguntados consideran que las campañas son "una de las mejores herramientas para prevenir las agresiones sexuales y sensibilizar a la población", el 28% apuesta por la educación afectivo-sexual y el 12% reivindica campañas para identificar diferentes formas de agresión sexual.
Además del informe específico sobre violencia sexual, López Abella entregó ayer a Santalices el informe ordinario sobre violencia de género. En él se informa de que en 2018 se otorgaron 6.537 órdenes de protección a maltratadas en Galicia y que hubo tres víctimas mortales.
