Las aulas de Religión se achicanReligión. Cada vez son menos los escolares que incluyen la materia en su currículum escolar, hasta el punto de que desde 2011 la asignatura ha perdido en la comunidad casi 60.000 "fieles" en las clases, sobre todo entre las nuevas promociones, los más pequeños del cole. En este contexto, que no es exclusivo de la comunidad, y debido a que "en fechas próximas", como apuntan, los padres tendrán que decidir sobre la petición de Religión Católica en los centros educativos, los obispos gallegos animan a los progenitores a solicitar esta enseñanza para sus hijos. En una misiva les recuerdan a los padres que es un "derecho fundamental" que tienen, "exclusivo" que "debe ser reconocido y aceptado", cuyo cumplimiento "se ha de garantizar".

En la carta firmada por el arzobispo de Santiago y el obispo auxiliar y los prelados de Tui-Vigo, Lugo, Ourense y Mondoñedo-Ferrol reivindican, frente a la voces que "están surgiendo" contra la presencia de la religión en el sistema educativo y el hecho de que "algunos estén interesados en no darle cabida" en este ámbito, que la enseñanza religiosa "contribuye a la formación integral de la persona".

En su carta, con motivo de la Jornada de Sensibilización sobre la Enseñanza Religiosa, los obispos sostienen que "la asignatura de religión en la escuela no es una concesión benévola de un Gobierno". "Todo gobierno y las instituciones educativas, sociales y sindicales deben respetar el derecho de los padres a que sus hijos sean educados según sus convicciones religiosas y morales", defienden.

Los prelados inciden en la utilidad de la Religión, que el Gobierno central tenía intención de que dejase de contar para las notas medias antes de los comicios. Apelan a que su finalidad en la escuela es "ayudar" a los alumnos a desarrollar una "formación integral", "proporcionar criterios y valores cristianos que configuren su personalidad descubriendo el sentido de la vida, favorecer la relación entre fe y cultura en una visión cristiana de la vida, capacitar para el diálogo respetuoso y constructivo con las otras tradiciones religiosas, ofrecer en diálogo con las demás materias la respuesta cristiana a las grandes preguntas de la vida y dar a conocer a Jesucristo y a su Iglesia".