El Estado vuelve a hacerse cargo desde el pasado 1 de abril de las cuotas a la Seguridad Social de aquellos cuidadores no profesionales de dependientes que quieren oficializar su labor para cobrar una ayuda mensual y cotizar, lo que ha provocado que el número de altas se dispare. En solo un mes, la cifra de coruñeses dados de alta por cuidar a un dependiente se duplicó al pasar de los 284 de marzo a los 612 al finalizar abril (un 115% más), según los últimos datos del Imserso, dependiente del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.

La ley de dependencia, que entró en vigor en 2007, permitió oficializar la labor que miles de cuidadores realizaban desde hacía años en silencio. La norma les permitía cotizar y recibir una ayuda de entre 200 y 400 euros al mes siempre que se diesen de alta en la Seguridad Social. Hubo un boom de inscripciones „solo en la provincia de A Coruña llegó a haber más de 3.250 cuidadores de este tipo„, pero todo cambió en 2012 cuando los recortes del Gobierno llevaron a reducir la paga un 15% y a que fuesen los propios cuidadores quienes sufragaran la cuota de la Seguridad Social. Poco a poco la cifra de dados de alta se redujo y de miles de cuidadores en la provincia coruñesa, se pasó a menos de 300. Ahora, el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó un real decreto por el que la Administración del Estado vuelve a financiar la cuota y parece que la situación vuelve a variar.

La estadística demuestra que los cuidadores de dependientes seguían con su labor, pero en silencio. La tendencia en todo el país ha sido, solo en el primer mes desde que el cuidador no paga la cuota, a que de nuevo se disparan las altas en la Seguridad Social por este trabajo. A Coruña registra el mayor aumento de la comunidad gallega (+115% entre marzo y abril) y es también la que cuenta con más cuidadores en números absolutos: 612, casi la mitad de los registrados en Galicia. Le sigue Ourense, con un incremento del 66% en treinta días y un total de 180 cuidadores dados de alta a finales de abril y Pontevedra (+62% al pasar de 233 a 378). Lugo es la que experimenta un menor incremento: solo tres cuidadores más entre marzo y abril (de 145 a 148).

Pero el cambio de tendencia no es algo exclusivo de Galicia sino de todo el país. Solo durante el mes de abril, el número de españoles que cotizan por cuidar de un dependiente se incrementó en casi 7.000 personas (6.598 nuevos). La cifra casi se duplicó al pasar de 7.304 en marzo a 14.262 a finales de abril, según la estadística colgada en la página del Imserso y con datos hasta el 30 de abril.

La evolución, eso sí, no fue igual en todas las comunidades. Pese a que en Galicia el número de cuidadores se disparó un 71% en solo 30 días (de 770 a 1.318), el incremento está muy lejos del registrado en Madrid (+178%), Canarias (+163%) o la Comunidad Valenciana y Andalucía, donde aumentó más de un 120% en ambos casos.

La estadística mensual del Imserso permite observar también el perfil de quienes se dan de alta en la Seguridad Social por hacerse cargo de los cuidados de una persona con algún grado de dependencia. Los cambios en la normativa no se traducen en cambios en el perfil del cuidador. Nueve de cada diez siguen siendo mujeres (12.881 en toda España, frente a solo 1.381 hombres) y además, en el 63% de los casos, ese cuidador supera los 50 años. De hecho, más de 2.600 se encargan de esta tarea pese a haber rebasado ya los 60 años.