La Generalitat Valenciana ha aprobado este año el plan integral de residuos, que establece para los municipios de más de 50.000 habitantes la obligación de implantar un sistema de recogida "puerta a puerta", al menos en algún barrio, antes del 1 de enero de 2021. Se prescindiría así de los contenedores. Quince municipios, con una población de 2,3 millones de habitantes, tienen el 45% de la población valenciana. El camión no pasará, sin embargo, todos los días de la semana, lo que ya ha suscitado quejas, sobre todo de los restaurantes que no tienen espacio para almacenar los residuos orgánicos. Como alternativa, se debe implantar un sistema de contenedores cerrados con identificación del usuario. Esos dos sistemas permiten introducir el pago por generación. Todos los municipios con más de 10.000 habitantes deberán aprobar sus planes locales de residuos antes de enero de 2021, y para los pequeños el plazo se alarga a septiembre del mismo año. En caso de no llevarlo a efecto, se obliga al Ayuntamiento a implantar un sistema de contenedores cerrados con identificación de los usuarios. Ese sistema responsabiliza al usuario del depósito de sus residuos recogidos selectivamente y de la mejora la calidad de los mismos al disminuir la proporción de impropios. En cualquiera de los dos sistemas de recogida será obligatoria la introducción del pago por generación.