Un total de 4.338 mujeres recibieron las ayudas periódicas que la Xunta otorga a víctimas de violencia de género desde su puesta en marcha en el año 2006 hasta el último ejercicio del que se tienen datos, 2018; período en el que el Gobierno gallego destinó más de 33,6 millones para financiar esta línea de prestaciones.

La secretaria xeral da Igualdade, Susana López Abella, ha hecho balance durante su comparecencia este martes en la Comisión 5ª de Sanidade, Política Social e Emprego de las ayudas a víctimas de violencia de género, que este año cuentan con un presupuesto total de 5,1 millones de euros, el máximo desde que comenzaron a concederse hace doce años.

En este período fueron atendidas 4.338 mujeres, de las que más de un 75 por ciento procedían de las provincias atlánticas, A Coruña (40%) y Pontevedra (36%), mientras que poco más de 1.000 eran residentes en Ourense (13%) y Lugo (11%).

En relación a este dato, los grupos de la oposición --PSdeG, En Marea y BNG-- han instado a la Xunta a reforzar la atención y la cobertura de las zonas rurales menos habitadas para así paliar "la brecha" existente entre el "eje atlántico" y el resto de la comunidad.

Datos de 2017 y 2018

La responsable de Igualdade en el Gobierno gallego ha detallado los informes de los dos últimos años sobre las ayudas para víctimas de violencia de género, que consisten en una prestación mensual que oscila entre los 300 y los 800 euros en función de factores como la renta, número de hijos a cargo o grado de discapacidad.

Así, en 2017 hubo un presupuesto de 4 millones de euros para financiar las ayudas percibidas por 417 mujeres, de las que el 52% residían en "núcleos urbanos muy poblados" y el 25% "en zonas rurales despobladas" .

Entre las beneficiarias, un 80% eran de nacionalidad española y en torno al 60% tenían al menos un hijo a su cargo. Solo dos mujeres solicitantes eran víctimas de trata con fines de explotación sexual, condición también recogida en la orden de ayudas. Tanto en 2017 como en 2018, en torno al 85% de las beneficiarias de las ayudas estaba en situación de desempleo.

Respecto al último ejercicio del que la Xunta dispone datos, 2018, el número de mujeres que recibieron la prestación aumentó en 166 hasta alcanzar las 583. López Abella ha destacado que el pasado año la partida presupuestaria subió a los 4,7 millones, cifra por debajo de la que se destinará en 2019 (5,1 millones) y que marca el "máximo" desde su puesta en marcha en 2006.

El perfil de las beneficiarias en 2018 se mantuvo respecto al año anterior con un pequeño incremento en el número de mujeres de nacionalidad extranjera (23%) y de las víctimas de trata, que fueron seis por las dos de 2017.

Novedades en 2019

Además del incremento presupuestario, Susana López Abella también ha resaltado que en la convocatoria de este año se han ampliado las "beneficiarias potenciales", ya que se eleva medio punto el umbral de renta -del 1,5 de IPREM se pasa al 2-- y se incorpora por primera vez a las víctimas de "violencia vicaria" o "por interpósita personal", es decir, aquellas mujeres cuyos hijos hayan sido asesinados por su pareja.

En su intervención, la responsable de Igualdade también ha recordado que la Xunta cuenta con otras dos líneas de ayuda para las víctimas de violencia de género: las destinadas a cubrir indemnizaciones incumplidas por insolvencia (debe estar fijada por orden judicial) y el "pago único" para mujeres con insuficiencia de recursos y dificultades especiales para encontrar empleo.

Oposición

En el turno de la oposición, los grupos han instado a la Xunta a aumentar la atención sobre las mujeres que residen en zonas del rural y a las víctimas de trata con fines de explotación sexual, ya, respecto a estas últimas, han llamado la atención sobre "el bajo número de solicitantes" entre un colectivo que padece "la situación de dominación más clara", como ha apuntado la diputada socialista María Pierres.

Por su parte, Olalla Rodil (BNG) ha avanzado que su grupo volverá a presentar en la Cámara una iniciativa para reclamar a la Xunta que aplique una "subida lineal" de las ayudas en todos los tramos de la renta de un 30 por ciento; mientras que Paula Quinteiro (En Marea) ha puesto el foco en que ha de reforzarse la "formación" entre las víctimas para fomentar que tengan "salidas laborales" como vía para su empoderamiento, especialmente en el campo económico.

Para la diputada popular Marián García Míguez, las cifras expuestas por la responsable de Igualdade avalan las actuaciones de la Xunta en la atención a las mujeres que padecen violencia de género, por lo que ha felicitado a López Abella por los informes y ha afeado a los grupos de la oposición "que no le diesen la enhorabuena".