Según el estudio de la Unidade de Psicoloxía do Consumidor e o Usuario de la Universidade de Santiago, un 2% de los menores gallegos "podría estar teniendo ya problema con el juego". El 1,4% de los jóvenes entrarían ya en la categoría de usuarios problemáticos, lo que implica, indican, una alta probabilidad de desarrollar un trastorno del juego en el futuro, y un 0,6% adicional presentaría "ya evidencias de una ludopatía".

Traducido: entre 600 y 700 adolescentes tendrían ya a día de hoy "claros síntomas de una adicción", advierte Rial Boubeta, quien añade que las familias que tienen estos "problemas" preguntan a dónde pueden llevar a sus hijos a tratarse y apunta que "hay una demanda asistencial no cubierta": "En la sanidad pública no hay una respuesta clara porque no hay dispositivos preparados, salvo excepciones, ni el personal está formado para dar cuenta de esta nueva problemática". No obstante, confía en que la Xunta dé luz verde a emplear parte de lo recaudado con las sanciones a mejorar la respuesta asistencial aparte de en prevención, por ejemplo entre las chicas, ahora jugadoras minoritarias.