El número de coruñeses que se dan de alta en la Seguridad Social para cotizar por el cuidado habitual de una persona dependiente se ha disparado en solo tres meses. Desde el pasado 1 de abril el Gobierno vuelve a sufragar la cuota de estos cuidadores no profesionales y esto ha provocado que las altas se hayan casi cuadruplicado en la provincia al pasar de 284 registrados en marzo a 1.041 a 30 de junio, según los últimos datos publicados del Imserso, organismo dependiente del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Una cifra que sitúa a A Coruña entre las diez provincias españolas con más trabajadores que cotizan por esta labor.

La ley de dependencia, que entró en vigor en 2007, permitió oficializar la labor de cuidados que desde siempre hacían miles de personas sin reconocimiento legal. Muchos se animaron a darse de alta en la Seguridad Social con el fin de cotizar de cara a la jubilación y cobrar una pequeña ayuda de entre 200 y 400 euros. Solo la provincia de A Coruña llegó a tener más de 3.200 registrados. Una situación que dió un giro de 180 grados cuando, a partir de 2012, el Gobierno dejó de sufragar la cuota de la Seguridad Social (debía afrontarla el propio trabajador) y recortó un 15% la paga. La cifra de cuidadores bajó en picado y se anotaron mínimos de menos de 300 en la provincia.

Ahora, la tendencia vuelve a invertirse. Si en marzo, cuando todavía era el cuidador quien pagaba la cuota, había 770 cuidadores dados de alta en Galicia, se cerró junio con 2.360, es decir, el triple (un 206% más). A Coruña es la provincia gallega que experimentó un mayor incremento (un 266% más), seguida de Pontevedra (+218% al pasar de 233 a 743), Ourense (+146%, de 108 a 266) y Lugo (+113,7%, de 146 a 310). Es algo generalizado en todo el país. Los datos del Imserso revelan que en el conjunto de España se pasó de 7.304 cuidadores de este tipo dados de alta en marzo a 37.497 a finales de junio: cinco veces más.

Oficializar la labor silente del cuidador no cala igual en todas las provincias. A Coruña es la décima con más casos , solo superada por Vizcaya (3.959), Madrid (2.620), Barcelona (2.462), Valencia (2.315), Murcia y Guipúzcoa (2.121), Alicante (1.688), Sevilla (1.471) y Málaga (1.301). En el lado contrario, Soria, donde solo 45 personas cotizan por cuidar de un dependiente o Ávila y Segovia, en las que apenas se rebasa el centenar de inscritos.

Si el análisis se hace por comunidades, Galicia se sitúa como la sexta con más casos al llegar a los 2.360. El País Vasco es la autonomía con más cuidadores que cotizan (6.832), seguida de cerca por Andalucía (6.557), Comunidad Valenciana (4.478), Cataluña (3.535) y Madrid (2.620). La Rioja, con solo 204, cierra la clasificación estatal.

La última estadística del Imserso, con datos del 30 de junio de 2019, revela que no ha cambiado el perfil de quien se encarga del cuidado de una persona con algún grado de dependencia. Ellas siguen siendo amplia mayoría. Nueve de cada diez cuidadores no profesionales dados de alta en la Seguridad Social son mujeres: 33.609, frente a solo 3.888 varones en toda España.

Lo mismo ocurre con la edad del cuidador. Pese a que la franja de edad con más trabajadores es la de menores de 50 años (15.118), son más quienes rebasan esa edad. Entre 51 y 55 años hay 7.852 personas dadas de alta en todo el país, otras 7.621 de los 56 a los 60 años y 6.906 que ya rebasan esa edad, según los datos del Gobierno.