J.A.L., el hombre diagnosticado de demencia fronto-temporal que mató a su mujer el 29 de enero de 2017 en la vivienda conyugal de O Carballiño (Ourense), quedó ayer en libertad hasta que el juzgado de familia inicie un internamiento no voluntario, con carácter urgente, en un geriátrico convencional. La Audiencia Provincial de Ourense llevó a cabo ayer la vista oral para estudiar la solicitud de libertad presentada por la defensa.

Los abogados de la defensa basan su petición de libertad en el criterio del Tribunal Constitucional que establece que, a falta de sentencia firme, únicamente es posible aplicar la jurisdicción civil y acordar el internamiento en un centro de carácter civil. El magistrado presidente de la Audiencia, Antonio Piña, ha aplicado dicho criterio recogido en una sentencia del Constitucional del año pasado, dado que existe una laguna jurídica importante que no contempla la prórroga de prisión en una persona demente a la que se le ha aplicado la eximente completa, como es este caso.

Por tanto, J.A.L. saldrá inmediatamente de prisión y permanecerá en casa con sus parientes hasta que el juzgado lo interne en un centro convencional.

La sentencia inicial fijó un máximo de 14 años en un psiquiátrico dependiente de administraciones penitenciarias.