Galicia invierte una media de 6.598 euros por cada alumno que estudia en un centro público de enseñanza no universitaria, lo que supone casi mil euros más que la media del conjunto de España (5.607) y la sitúa como la quinta comunidad con mayor gasto público por estudiante, solo por debajo de País Vasco (9.054), Navarra (7.128), Cantabria (6.917) y Asturias (6.785), según el informe Sistema estatal de indicadores de la educación 2019 que acaba de publicar el Ministerio de Educación, con datos correspondientes al año 2016.

El estudio del Gobierno compara lo que las autonomías invertían en educación en 2016 y 2011. Los datos revelan que el gasto medio por alumno en la enseñanza bajó en todas las comunidades, excepto en Canarias, donde en 2016 destinaron 195 euros más que en 2011 y en Extremadura, con una inversión ahora dos euros más alta. En el conjunto del país, el gasto por estudiante cayó un 7,5% al pasar de 6.062 a 5.607 euros, un descenso similar al experimentado en la comunidad gallega: se destinaron 527 euros menos, lo que supone un 7,3% menos. Unas cifras, sin embargo, que no son de mínimos ya que en 2014, Galicia destinó 6.241 por alumno, es decir, dos años después la inversión había aumentado en 357 euros. Las comunidades que experimentaron una mayor caída del presupuesto por alumno en el periodo entre 2011 y 2016 fueron Castilla-La Mancha (un 23,7% menos en seis años), Navarra (14,7%) y País Vasco (10,7%).

El Ministerio de Educación también constata grandes diferencias por comunidades. El País Vasco lidera la clasificación estatal con una inversión media de 9.054 euros por cada alumno que estudia en un centro de titularidad pública, lo que supone casi el doble que el gasto de Madrid (4.591), la autonomía que menos dinero público destina a cada estudiante. En el furgón de cola se sitúan también Andalucía y Castilla-La Mancha. Comparado con Madrid, Galicia destina un 43% más de fondos a cada alumno.

Si no se diferencia entre centros públicos y privados, el gasto medio por alumno en España sube hasta los 5.903 euros, lo que supone un 25,4% del Productor Interior Bruto (PIB) por habitante. A medida que aumenta la edad del estudiante, suben los recursos públicos destinados a su educación. Por ello, mientras el gasto medio por alumno de Educación Infantil en el conjunto del país es de 4.731 euros, pasa a 4.985 en Primaria, se dispara a los 6.216 en Secundaria y supera los 8.000 en la educación superior. En la última década analizada por el departamento de Isabel Celaá, entre 2006 y 2016, fue la inversión en Infantil y Primaria la que registró un mayor incremento (+16 y +10%, respectivamente).

Educación también compara la inversión educativa en España con la del resto de la Unión Europeo. Al analizar el gasto por alumno en centros tanto públicos como privados y en relación por el PIB por habitante, España se sitúa en mitad de la clasificación: con una inversión media de 6.517 euros, ocupa la decimocuarta posición de 28 países. Destina casi el doble que Bulgaria (3.117), que ocupa la última posición a nivel europeo, pero el gasto medio español está muy por debajo de los más de 16.000 de Luxemburgo „a la cabeza de la UE„, los 10.700 de Austria o los más de 9.000 de Bélgica, País Bajos, Reino Unido o Suecia. Finlandia, que siempre se pone como ejemplo del modelo educativo, destina una media de 8.606 euros de fondos públicos por alumno.