El Hospital La Princesa de Madrid perdió casi 300.000 euros en medicinas por un fallo eléctrico que se produjo a finales de abril y estropeó fármacos tras desconectarse dos días una de las neveras del servicio de Farmacia del centro, confirmaron fuentes de la Consejería de Sanidad. Ante esta situación, el diputado del PSOE en la Asamblea de Madrid José Manuel Freire adelantó que pedirán el informe sobre las causas de lo sucedido y si procede, la comparecencia del consejero de Sanidad, Enrique Ruíz Escudero, en la Cámara regional para que explique lo ocurrido.

Según adelantó ayer El Confidencial y señalaron fuentes de Sanidad, el fallo se produjo el pasado 1 de mayo cuando se detectó que la nevera del Servicio de Farmacia había estado desconectada desde el día 29 de abril, alcanzando una temperatura de 16 grados centígrados. "Durante esas 48 horas no hubo pedidos por lo que nadie accedió a la nevera y no se pudo detectar", señalaron las mismas fuentes, que indicaron que tras solucionar el problema y ponerla en marcha, para garantizar la seguridad y eficacia de los fármacos se puso en cuarentena la medicación, se contactó con los laboratorios para conocer si en las condiciones de temperaturas alcanzadas los medicamentos mantenían su estabilidad.

Tras ello, se destruyeron los medicamentos que no tenían estabilidad dando su baja correspondiente. El coste total de los fármacos desechados es de 297.818,83 euros. La investigación realizada por el centro ha determinado que el incidente se debió a un fallo del suministro eléctrico, probablemente por una sobrecarga del sistema, pero cuyo origen último se desconoce.

Además, el sistema automático de control de la temperatura tampoco funcionó correctamente. "No se ha vuelto a registrar ninguna incidencia en esta nevera. Como medida de precaución, junto al control automático, se ha establecido el control visual regular de la instalación en cada turno", agregaron desde Sanidad.

Por su parte, José Manuel Freire cifró en 400.000 euros las pérdidas. "Parece ser que eso ha tenido repercusión en contratar menos enfermeras para este verano, con el consiguiente cierre de camas", reprochó.