Los nefrólogos alertan del aumento de la enfermedad renal crónica en España ya que los casos se incrementaron un 20% en los últimos diez años, según informaron expertos ayer durante la presentación del XLIX Congreso Nacional de la Sociedad Española de Nefrología (SEN) que se celebrará desde mañana y hasta el martes en A Coruña. El presidente del comité organizador, Miguel Pérez Fontán „del Servicio de Nefrología del Complexo Hospitalario Universitario da Coruña (Chuac„; el gerente de la Xerencia de Xestión Integrada da Coruña, Luis Verde Remeseiro, y la supervisora de enfermería de diálisis del centro coruñés, Teresa Pérez, fueron los encargados de presentar ayer este encuentro que reunirá a un millar de especialistas de todo el país.

"La enfermedad renal crónica no da síntomas y por eso registra una alta tasa de mortalidad", aseguró Pérez, quien resalta que esta dolencia no se diagnostica como otras y concienciar a los grupos de riesgo es uno de los retos del congreso. En este sentido, considera que las redes sociales proporcionan una forma muy buena de "llegar a la población con fluidez e implementar medidas de prevención y tratamiento de esta enfermedad".

Este es uno de los objetivos que se han marcado desde el comité organizador de este congreso anual, integrado por quince profesionales de la nefrología de los hospitales de A Coruña y Ferrol, con la participación de más de mil congresistas, que representan algo más del 40 % de los nefrólogos de España. Algunos de los temas de las casi 700 contribuciones científicas que se expondrán en este marco, que también recabará el punto de vista de pacientes renales, se centrarán en aspectos emergentes como el uso de redes sociales, biomarcadores o la atención a los tres grupos de población que más preocupan: ancianos frágiles, pacientes oncológicos y con enfermedad cardíaca grave.

Los participantes en el congreso harán hincapié en fomentar la sensibilidad y dar a conocer a la población española la importancia de la enfermedad renal crónica, una patología "muy desconocida que tiene un grave impacto en la espectativa de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes", añade este facultativo. Según sus datos, la enfermedad renal crónica afecta a 15 % de la población española, casi siete millones de personas, lo que la coloca al nivel de la diabetes en cuanto a sus problemas y que "va en aumento en pacientes y en incidencia". De 1.000 pacientes por millón en 2006 se ha pasado a 1.300 en la actualidad, un incremento que Pérez atribuye a que la enfermedad renal está ligada con enfermedades de la sociedad actual, como la obesidad, la diabetes, el tabaquismo o la hipertensión arterial, que predisponen al fallo renal.

La enfermedad renal crónica es la octava causa de muerte en España, la segunda que más ha crecido en los últimos diez años después del alzheimer. Este "problema de salud importante y creciente", continúa el presidente del congreso, supone en términos sanitarios que los pacientes en diálisis en España representan el 0,1 % de la población, que generan más del 2 % del gasto sanitario. "Es un gasto muy desproporcionado y por ello es importante prevenir la enfermedad", argumenta Pérez, que apunta el reto de los nefrólogos de que los pacientes no desarrollen la enfermedad renal crónica y la prevención sea a nivel primario y secundario.

De los 7 millones de pacientes afectados en España, algo más de 60.000 están en tratamiento renal sustitutivo, es decir, requieren tratamiento de diálisis o trasplante. En Galicia, se estima que ya son más de 270.300 las personas que tienen esta enfermedad, de los que más de 3.700 son pacientes que precisan tratamiento renal sustitutivo.