Más de 180 obispos de todo el mundo buscan desde ayer y hasta el próximo 27 de octubre soluciones a los problemas de la Amazonía en el Sínodo que ayer inauguró en Roma el papa Francisco y que por primera vez cuenta con la presencia de 35 mujeres aunque eso sí, no tendrán opción de voto. El papel de la mujer en la Iglesia y el debate sobre si permitir ordenar sacerdotes a hombres casados para solucionar la falta de religiosos en la Amazonía son dos de los puntos que analizarán los obispos estas semanas.

Duran la misa de apertura del Sínodo, el papa Francisco advirtió sobre los riesgos de "los colonialismos". "¿Cuántas veces ha habido colonización en vez de evangelización? Dios nos guarde de los nuevos colonialismos", señaló el Pontífice, quien precisó: "El fuego aplicado a los intereses que destruyen como el que recientemente ha devastado la Amazonía no es el del Evangelio". Los obispos mantendrán diferentes reuniones hasta el día 27.