El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, rectifica y aseguró ayer que el gobierno local estudiará ahora si abandona o no el protocolo Viogen, que desarrollaba hasta ahora de forma conjunta con las Policías Autonómica y Nacional, para proteger a las víctimas de violencia de género. A preguntas formuladas por los periodistas, atribuyó esta decisión a la jefa de la Policía Local, María Barreda, tras aclarar que ella le comentó que este servicio estaría mejor atendido por las policías Nacional y Autonómica. "Lo que hicimos es fiarnos de la máxima experta que es la jefa de Policía Local", esgrimió Jácome, quien subrayó que el gobierno local "recabará más información" para ver "si la técnico se equivocó".

Unas aclaraciones, las del alcalde, que se producen tras las críticas formuladas por varios colectivos y partidos políticos tras esta decisión. Jácome argumentó el lunes que dejaban de participar en el seguimiento a maltratadas por "falta de recursos".