Uno de los agentes de la unidad orgánica de la Policía Judicial que participó en el levantamiento del cadáver de Diana Quer ha explicado este lunes en el juicio contra José Enrique Abuín Gey, alias El Chicle -asesino confeso- juicio José Enrique Abuín GeyEl Chicleque el cuerpo de la joven de 18 años fue lastrado con un cable que no se corresponde con ninguno de los encontrados en la nave.

En la primera declaración testifical de esta semana, el agente responsable del departamento de laboratorio del servicio de Criminalística ha apuntado que en el pozo de Asados, en Rianxo (A Coruña), en el que estaba la chica, se encontraron dentro del silo cuatro bloques cerámicos anudados con características compatibles con dos posibles lastramientos.

Así, en el fondo del mismo se localizaron dos bloques de material cerámico unidos por un cable de electricidad con el que el cuerpo de Diana pudo ser contrapesado una primera vez. Y este amarre sí puede ser compatible con algún cable de los hallados en la nave de Asados.

Sin embargo, el cuerpo como tal apareció lastrado con otros dos bloques de similares características pero con otro cable de una red de datos y que no coincide con ninguno de los que se requisaron y que, además, estaba "cortado" con algún objeto cortante.

Cerca del pozo, apareció, asimismo, según ha contado este testigo, un cuchillo con el que pudo ser cortado.

Asimismo, en la antigua fábrica de gaseosas figuraba un cable correspondiente a una red de datos pero que no presentaba "correlación directa" con el del pozo puesto que estos cables están numerados y, en este caso, la numeración difería en unos 3.000 números.

Los bloques que lastraban el cuerpo de Diana Quer, ha relatado, presentaban una unión "llamativa" ya que evidenciaban un "nudo que no es muy común" y que tenía "como finalidad, no cabe duda, tener el control de los bloques antes de dejarlos caer al fondo" del agujero.

Sobre las pertenencias halladas en el mismo, el agente ha asegurado que solo estaban el bolso de la víctima y varios botes con útiles de aseo personal que pudieron caer de éste porque estaba abierto.

Y, pese a que el cadáver se encontró "completamente desnudo", la única prenda de ropa encontrada en el pozo fue el tanga de Diana.

Acerca de las bridas halladas, el agente ha relatado que se localizaron una en el fondo del pozo y otra anudada en el pelo de la chica. El agente ha considerado "muy poco probable" que se enredasen de forma accidental. Aparte, se encontraron "trozos" de otras bridas.

Durante la prueba testifical, el agente ha dado cuenta de la mala visibilidad existente en la nave que dificultaría desplazarse por la misma y bajar, sin luz, la casi veintena de escalones que llevan hacia el sótano en el que se encontraba el pozo donde se halló el cuerpo de la joven.

Con todo, ha destacado este especialista que el acusado conocía la nave perfectamente y así lo dejó él mismo acreditado la noche del levantamiento del cadáver cuando se dirigió a los investigadores "indicándonos las medidas que tenía la nave". "Nos sorprendió mucho esa actitud fría e indiferente", ha profundizado.