El cuerpo de Diana Quer flotaba a medio metro del fondo del pozo de Asados lastrado con dos bloques cerámicos de 18,4 kilos unidos por un cable de transmisión de datos y una lazada especial para controlar su manejo, según los dos expertos de Criminalística que declararon ayer. En contra de lo que aseguró al jurado José Enrique Abuín, acusado del rapto, violación y asesinato de la joven de 18 años, los investigadores descartaron ayer que hubiera arrancado el cable en el sótano de la nave, porque allí no había cable de este tipo. Tampoco pudo probarse que correspondiera a la planta baja, dado que el cableado no mantiene continuidad numérica. Además, el cable no fue arrancado sino cortado, y se halló un cuchillo. La defensa alegó que la nave había sido sometido a una limpieza entre la desaparición de Diana y el hallazgo del cadáver.

Los dos agentes, que participaron en el levantamiento del cadáver, manifestaron que el Chicle pudo haber fallado en su primer intento de hundir el cuerpo de la joven en el pozo, pues en el fondo se encontraron otros dos bloques similares unidos por un cable eléctrico, más endeble. Una situación compatible con la que sostiene la Fiscalía, que cree que tras ocultar el cuerpo volvió para fondearlo, pero contraria a la del acusado, que aseguró que sólo la lastró una vez, cuando la mató.

Ambos coincidieron en que Gey conocía bien la nave. Cuando iban a iniciar las mediciones, se acercó y "con gran frialdad mientras otros compañeros rescataban el cuerpo" les dijo: "Si vais medir de pilar a pilar ya os digo que son 5 metros", y así fue.

La brida enredada en el pelo de la víctima, con la que la acusación considera el Chicle la estranguló, centró gran parte de los interrogatorios. Y si inicialmente la defensa puso en entredicho a los agentes, que aseguraron que medía unos 0,9 milímetros de ancho, frente a los 0.5 que reseñó el Juzgado de Riveira, la fiscal lo rebatió con el informe de Toxicología: 0,8. Un agente explicó que se trataba de una brida "sin vuelta atrás" „para abrirla hay que cortar„ y estimó poco probable que ya estuviese en el pozo. Otro de los investigadores aseguró que el cuerpo pudo haberse introducido por la arqueta pese a la posición de piernas arqueadas, pues el rigor mortis, se puede vencer.