Un día después de votar en contra del informe favorable del Consello Galego de Universidades al proyecto de creación del primer campus privado de Galicia, los rectores gallegos se ratifican en su posición.

"Galicia no necesita un campus privado", sostiene el de la Universidade de Vigo, Manuel Reigosa. ¿Por qué? Porque, en su opinión, las universidades públicas ya cubren las necesidades de Galicia en materia de enseñanza superior. Además la previsión es que desciendan los alumnos en los próximos años por la crisis de natalidad. También cuestionó ayer que la oferta de la Universidad de Abanca sea "repetitiva" con la ya existente. Este argumento también fue esgrimido por el rector de Santiago.

Antonio López niega que el proyecto de Abanca "complemente y mejore" a las tres universidades públicas, dos requisitos que exige la ley para crear una nueva institución académica. El rector compostelano defendió que las universidades públicas pueden "atender perfectamente las demandas tanto de los estudiantes como de las empresas". "Hay que apostar por reforzar el sistema universitario público antes de abrir la posibilidad de una privada", abundó.

Por su parte, la conselleira de Educación, Carmen Pomar, dice entender "el legítimo recelo" de los rectores, pero remarcó que la legislación gallega es "más restrictiva" que la estatal a la hora de autorizar un campus privado. También insistió en que el proyecto está "abierto", pues aún quedan "muchos pasos que dar" antes de recibir el visto bueno del Parlamento gallego. Eso sí, hasta ahora todos los informes "han sido favorables". Por su parte, el líder de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, pide a la Xunta que escuche a los rectores y sus temores.