Trabajadores de residencias de mayores de la Xunta denunciaron ayer la "sobrecarga" de trabajo en la que desempeñan su labor y que, afirman, "roza la esclavitud". A través de una nota firmada por la representación sindical de la CIG, los trabajadores aseguran que "soportan turnos similares a servicios mínimos durante casi todo el año", dada la "no cobertura del personal mediante listados de sustituciones temporales".

"No se respetan las ratios", denuncian los trabajadores, que califican los cuadros de "insuficientes para la atención de los usuarios". "En los centros de A Coruña, puede quedar una enfermera y dos auxiliares de enfermería al cargo de casi 200 residentes con diversos grados de dependencia en un turno de tarde, de noche o de fin de semana", aseguran, explicando que, en algunos casos, se ven obligados a llamar al 061 por urgencias dada la falta de personal médico. También critican la demora en la valoración de dependientes.