La mayor parte del transporte de personas y mercancías en el área atlántica se realiza a través de carreteras y líneas ferroviarias que, en numerosas ocasiones, transcurren pegadas al Atlántico, lo que aumenta los riesgos ante inundaciones o tormentas. El proyecto europeo Sirma trabaja en un paquete de herramientas de control y gestión que permitan anticipar y mitigar los efectos de los eventos naturales extremos derivados del cambio climático, así como de los procesos de corrosión fuerte. El Grupo de Geotecnologías Aplicadas de la UVigo es uno de los diez socios de un consorcio que reúne a investigadores de universidades de Portugal, Reino Unido, Irlanda y Francia, así como la empresa AZVI, y dos gestores estatales (Irish Rails e Infraestruturas de Portugal SA).

La iniciativa, financiada dentro del programa europeo de cooperación Interreg, está liderada por la Universidad de Minho y hoy celebra en la sede de Industriales en Torrecedeira un workshop para exponer los primeros resultados obtenidos. Además asistirán expertos nacionales e internacionales en comportamiento y resiliencia de infraestructuras, últimos avances en prevención o efectos del cambio climático en puentes metálicos.

Los trabajos del consorcio comenzaron en abril del pasado año y continuarán hasta marzo del año 2022 con el objetivo de que las infraestructuras atlánticas estén mejor preparadas ante la emergencia global y sus usuarios las utilicen de manera más segura y eficiente.