La Policía Nacional halló ayer en el río Ebro el cadáver de la abuela de la niña de 5 años que apareció muerta el lunes en la habitación de un hotel de Logroño. La madre de la pequeña, que cuando llegaron los agentes estaba sentada en la ventana con intención de suicidarse, permanece detenida, según informaron ayer fuentes de la investigación.

Un amplio dispositivo de la Policía Nacional se desplegó desde primera hora de la mañana en la ribera del río situada en la parte trasera de la plaza de toros de Logroño, donde se encontró, hacia las 12.00 horas, el bolso de la mujer, cuyo cadáver fue hallado a los pocos minutos a unos 150 metros, sumergido en el río. Los agentes iniciaron la búsqueda de esta mujer „cuya identidad deberá ser confirmada oficialmente aunque todo apunta a que es la abuela de la niña„ después de que en la mañana del lunes se encontrara el cadáver de su nieta, sin signos externos de violencia, en la habitación de un céntrico hotel de Logroño, suceso por el que se encuentra detenida su madre, que intentó suicidarse.

Equipos de la Policía Nacional de La Rioja y de Madrid, con el apoyo de un helicóptero, peinaron el cauce del Ebro a su paso por Logroño, en lo que colaboraron los buceadores de los bomberos de la capital. Las numerosas personas que paseaban por esta zona del parque de la Ribera se agolparon junto al cordón policial, que impidió que se pudiera observar el levantamiento del cadáver y su traslado hasta el furgón funerario.

La abuela pasó las últimas horas del domingo en la capital riojana junto a la menor y su hija, si bien no llegó a registrarse con ellas en el hotel, y era buscada tanto en Logroño „donde se ha tratado de reconstruir sus últimos pasos„ como en la ciudad riojana de Haro, su lugar de residencia junto con la detenida y un hermano de esta.

El padre de la pequeña, separado de su pareja, denunció a última hora del domingo que su exmujer había incumplido el horario de entrega de la menor, lo que ya había ocurrido otras tres veces. Además, otro familiar de la madre entregó unas cartas de despedida que supuestamente había dejado.