Trasladarse a cientos de kilómetros de su hogar durante el tiempo que sea necesario para que su hijo se someta a unas pruebas, reciba un tratamiento o se recupere de una cirugía de corazón. Esta es la realidad a la que se enfrentan cada año decenas de familias con niños que sufren alguna cardiopatía y que „aunque residan en otra provincia gallega, en Asturias, Castilla y León o incluso en el norte del Portugal„ son derivados al Materno Infantil Teresa Herrera de A Coruña al ser centro de referencia a nivel nacional. Para aliviarles de la carga económica y la preocupación de dónde vivir mientras el pequeño está en el hospital, la Fundación María José Jove puso en marcha hace cinco años el Hogar de Corazones, un programa que les ofrece alojamiento gratuito. Desde entonces, se ofreció esta ayuda a un total de 387 familias y la cifra aumentó un 50% al pasar de las 64 alojadas en 2015 a las 94 de 2019.

Hace poco más de dos décadas, el Materno puso en marcha un programa de apoyo psicosocial "para facilitar el soporte emocional tanto a las familias con bebés y niños con cardiopatías como a embarazadas a las que se detecta una cardiopatía en el feto y tienen que venir a dar a luz aquí", explica una de las trabajadoras sociales del Materno Rocío Seráns, quien explica que fue a partir de ahí cuando detectaron que más allá de las cuestiones de salud, "estas familias estaban muy preocupadas por dónde alojarse, cómo organizarse, la cuestión económica...". "Hay algunos que pueden estar en un hotel pero si la situación se alarga se eleva el coste y otras familias que no pueden permitírselo", explica Seráns, que recuerda que fue así como surgió la idea de crear el Hogar de Corazones.

El programa ofrece alojamiento gratuito para dos familiares de los niños generalmente en un apartahotel para que puedan disfrutar de una habitación con cocina incluida "y así tener intimidad y estar como en su casa" y en caso de no haber plazas suficientes, se les sufraga el alojamiento en un hotel. La estancia media durante el pasado año fue de 9 días ya que osciló entre la familias que solo necesitaron alojamiento un día y las que tuvieron que estar hasta 54, según informan desde la Fundación María José Jove, donde renovaron por un año más el acuerdo para financiar este programa.

El número de familias creció un 50% en 5 años, pero desde el Materno aseguran que puede deberse a varios motivos. "A que haya más pacientes o a que los que vienen sean de fuera de A Coruña", indica Seráns. De las 94 familias atendidas durante el pasado año, la mayoría (30) procedían de la provincia de Pontevedra, 23 de otros puntos alejados de la provincia de A Coruña, 21 de Ourense, once de Lugo, siete de Asturias, una de Castilla y León y otra de Portugal. Los casos derivados a la Unidad de Cardiopatías Infantiles del Materno son diversos. Desde embarazadas a las que se les detecta una cardiopatía en el feto y deben trasladarse para dar a luz aquí a neonatos con alguna patología, lactantes o escolares que precisan una cirugía o recibir un tratamiento que les obliga a estar cerca del centro o menores en lista de espera para trasplante cardíaco. El año pasado, 44 de las familias que recibieron el apoyo del Hogar de Corazones eran parientes de un lactante, 32 de pequeños en edad escolar, 17 de neonatos y una era gestante. Todos recibieron apoyo para evitar sumar preocupaciones de logística al periodo de enfermedad.