El relator de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre la extrema pobreza, Philip Alston, considera que "hay dos Españas muy distintas", una de las cuales tiene un porcentaje muy alto de ciudadanos "al borde de sus posibilidades tratando de sobrevivir" y que se sienten "abandonados" por las políticas sociales. Estas son algunas de las conclusiones de Alston después de recorrer durante 12 días seis comunidades, entre ellas Galicia, en las que vio "las peores situaciones en colectivos como inmigrantes, población gitana, personas con discapacidad o familias desahuciadas", pero también un grupo de ciudadanos que vive en una situación "económica y social precaria y poco ilusionante".

A juicio del relator, España "está fallando" a las personas que viven en la pobreza, cuya situación se encuentra entre las peores de la UE ya que pasa del 26% de la población española, según Eurostat, y solo es superada por Bulgaria y Rumanía (32%), Grecia (31%) e Italia (27%).

El relator de la ONU achaca esta situación a la política que se ha hecho en los últimos diez años y lamenta el alto nivel de desempleo, una gran burocracia, "una crisis de vivienda de proporciones inquietantes y un sistema de protección social completamente inadecuado".

Entre las recomendaciones que transmitirá al Gobierno y que hará públicas el próximo mes de junio en Ginebra, Alston destaca la aplicación de una renta mínima nacional, así como una reforma fiscal redistributiva porque "se recaudan menos impuestos que en países del entorno" y "la clase media recibe muchas más prestaciones que la pobre".

Alston expresó su preocupación por la situación de la vivienda, derecho contemplado en la Constitución, pero que en la realidad "esto no significa nada" y pidió a los legisladores que empiecen a "tomarse en serio" este problema para parar los desahucios, incrementar la vivienda social y "limitar el precio de los alquileres en las grandes ciudades".

Alston, que alabó el sistema nacional de salud y el de pensiones de los mayores, criticó también el alto abandono escolar y denunció que el sistema aporta "poca movilidad a los colectivos de ingresos más bajos", ya que "uno nace pobre y pobre se queda". El miembro de la ONU relató su encuentro con "gitanos que viven en basureros" y que en algunos sitios "son tratados como escoria", inmigrantes en el sur de España que están "en las peores condiciones", ciudadanos "en lucha contra los desahucios" y "personas que viven con el dilema de elegir entre calefacción y comida".

El relator de la ONU también se entrevistó con responsables del Ejecutivo y elogió los proyectos que tiene el Gobierno de coalición para combatir la pobreza, al que anima "a embarcarse por el camino que lleva a la justicia social". "Los derechos sociales tienen que ser la base de la política gubernamental plasmados en la Constitución, pero no se los toman en serio", lamenta Alston.