La Policía mantiene abiertas todas las hipótesis en la investigación abierta tras hallar en la madrugada de ayer en una vivienda de Valladolid a una mujer con algunas lesiones, a su esposo en un sofá con un arma clavada en el pecho, muerto, y a dos hijos de ambos, de tres años, dormidos. "No se puede descartar ni afirmar nada porque todas las hipótesis están abiertas", indicó el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez, quien confirmó que la esposa del fallecido, después de recibir asistencia hospitalaria, fue dada de alta.

"Ahora hay que esperar a los resultados de la autopsia y a la declaración que preste la mujer", manifestó el subdelegado, quien concretó que no consta registro de denuncias por violencia en relación con ninguno de los dos cónyuges.

Fue una llamada que entró al 112 procedente del 016 la que alertó a las 03.35 horas de que una mujer había manifestado que estaba siendo víctima de una agresión por parte de su marido.Una vez en el lugar, las dotaciones accedieron a la vivienda, cuya puerta estaba abierta, y hallaron en la entrada a una mujer de 39 años en estado de gran agitación, que estaba siendo atendida por los servicios sanitarios asistenciales y que presentaba aparentemente algunas lesiones. En el sofá encontraron a un hombre muerto.