Las autoridades de la región italiana del Véneto anunciaron ayer la suspensión del Carnaval de Venecia mientras que se han cancelado los eventos previstos en el teatro de La Scala (Milan) y han cerrado decenas de escuelas por todo el país como parte de las medidas de contención decretadas por el Gobierno italiano contra el brote de coronavirus que ha dejado ya tres muertos y más de 150 afectados en el país. La tercera víctima mortal es una anciana que se encontraba desde hace tiempo ingresada en oncología en un hospital de Cremona. Ella se suma a otros dos hombres, de 78 y 77 años, que murieron y dieron positivo en el coronavirus.

El grueso de afectados se da en el norte de Italia y por ello, las autoridades han reforzado las medidas de prevención. Los esfuerzos de contención pasan por encontrar al llamado paciente cero, origen del contagio en Italia. "Es muy importante que lo identifiquemos, de ahí el fuerte cordón sanitario que hemos instalado. Y es importante porque de esta manera puede reconstruir la cadena de contactos y posibles infecciones", explicó ayer el jefe de Protección Civil, Angelo Borrelli, en declaraciones recogidas por La Repubblica.

El primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, anunció el sábado la adopción de un decreto legal para la contención de epidemias que restringirá la entrada y la salida en Véneto y Lombardo. En Véneto se han cerrado escuelas y suspendido todas las actividades públicas y en ambas zonas se suspenden los eventos deportivos. Piamonte y Emilia Romagna han cerrado las escuelas.