El gerente del grupo Laboratorios Microal SCL, que diseñó a principios de 2016 el manual del sistema de autocontrol de Magrudis y que detectó el pasado mes de febrero que una de sus piezas cárnicas tenía listeria, aseguró ayer ante el Juzgado de Instrucción número 10 de Sevilla „que investiga la causa por el brote de listeria producido el pasado verano relacionado con el consumo de sus productos„, que la empresa sabía desde febrero que éstos estaban contaminados.

Un informe desvela que la carne analizada tras el brote tenía hasta 150.000 veces más niveles de listeria del máximo permitido.