El Gobierno alemán confirmó ayer el cierre de fronteras con la reintroducción de controles a partir de hoy con Francia, Austria, Suiza, Luxemburgo y Dinamarca por el coronavirus. "He tomado la decisión de reintroducir temporalmente controles fronterizos con Francia, Austria, Suiza, Luxemburgo y Dinamarca", declaró el ministro del Interior, Horst Seehofer, en rueda de prensa.

La medida, que entra en vigor a partir de las 08.00 horas (07.00 GMT) de hoy lunes, fue consensuada con la canciller, Angela Merkel; el vicecanciller y ministro de Finanzas, Olaf Scholz; y los jefes de Gobierno de los estados federados afectados „Baviera, Baden-Württenberg, Renania-Palatinado, Sarre y Schleswig-Holstein„, agregó. Las restricciones incluirán mayores controles en la frontera y la posibilidad de denegar la entrada en Alemania.

Precisó que no se verán afectados por esta medida el tráfico de mercancías y las personas que viven y trabajan a caballo entre dos países. Los ciudadanos alemanes que quieran regresar al país podrán hacerlo, añadió, y señaló que en caso de ser sospechosos de contagio se tomarán las medidas pertinentes en colaboración con las autoridades sanitarias. Subrayó que las personas que no tengan razones de peso para moverse ya no podrán entrar ni salir del país, al tiempo que urgió a los ciudadanos a prescindir de viajes innecesarios. Agregó que la medida ha sido puesta en conocimiento de los países europeos vecinos y la Comisión Europea (CE).

"La propagación del coronavirus avanza de forma rápida y agresiva tanto en Alemania como en los países vecinos europeos. Podemos partir de la base que todavía no hemos alcanzado el pico", advirtió Seehofer. Para interrumpir la cadena de contagios se hace necesario restringir la movilidad, agregó. Horas antes, medios habían informado del cierre de fronteras, aunque sólo de las limítrofes con Francia, Austria y Suiza.