El estado de alarma decretado para contener la propagación del coronavirus afectará drásticamente no solo a la vida de la ciudadanía y la economía, sino al funcionamiento de la administración en todos los ámbitos y servicios públicos, también en GaliciaGalicia. La Xunta suspenderá parte de la actividad hospitalaria ordinaria para ampliar los medios destinados a los afectados por Covid-19, paralizará los plazos de trámites administrativos, limitará a la presencia en colegios e institutos a un miembro de la dirección y enviará a su casa a los funcionarios que puedan trabajar de forma telemática. El presidente del Ejecutivo autonómico, Alberto Núñez Feijóo, avanzó ayer la ampliación de restricciones que se aplicarán en Galicia tras participar en la videoconferencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con los responsables de todas las autonomías para coordinar la respuesta a la emergencia sanitaria y económica que ha motivado la declaración del estado de alarma.

Sanidad. "Vamos a reprogramar la atención sanitaria ordinaria en los hospitales, tanto de consultas, como de pruebas diagnósticas y cirugía, para dejar espacio, camas y tecnología a disposición de posibles contagios", expuso Feijóo en una rueda de prensa telemática. Galicia sigue con una tasa de contagios menor que la media estatal, pero el pico de enfermos todavía no se ha alcanzado, según la previsión de la administración. Las necesidades sanitarias exigen más medios y la Xunta ha informado ya a la Consellería de Sanidade que "tiene a su disposición créditos de la comunidad para la contratación de personal". "Por supuesto que necesitamos más personal, desde el pasado viernes hemos ido teniendo cada vez un mayor incremento de contagios", reconoció el titular de la Xunta.

MIR. Feijóo avanzó que ha reclamado al Gobierno central permitir que los MIR y farmacéuticos de último año reciban la autorización para ejercer como especialistas, dando por descontados los últimos meses que les restaban para ello. El Ministerio de Sanidad ayer autorizó la contratación como especialistas a quienes hubiesen aprobado sus pruebas, pero no hubiesen logrado plaza.

Profesores. La Xunta varió de nuevo su criterio y eximió a todos los docentes y personal no docente de acudir a sus puestos de trabajo. Impartirán clases mediante internet o el método que estimen durante al menos dos próximas semanas. Solo deberá personarse en colegios e institutos un miembro de la dirección: director, jefe de estudios o secretario. Podrán turnarse. A los centros con menos de seis aulas no tendrá que acudir nadie.

Funcionarios. La administración impondrá desde hoy el teletrabajo para el personal autonómico. En caso de que no pueda optarse por esa modalidad, el personal afectado deberá permanecer en su vivienda localizable y sus tareas quedarán suspendidas, salvo en casos de puestos "esenciales", como seguridad, pago a proveedores o directivos.

Parálisis administrativa. La Xunta suspende los plazos de tramitación de procedimientos administrativos como ayudas, concesiones o concursos públicos mientras se prolongue el estado de alarma.

La Xunta también decidió anoche, tras la reunión del centro de coordinación operativa, nuevas restricciones. Las visitas a los centros de mayores y similares quedarán prohibidas, salvo "casos excepcionales" que autorice la dirección de los mismos.

Comedores sociales. Los comedores sociales, como el resto de recursos similares, deberán estar abiertos en su totalidad. Se organizarán turnos para que no acojan más de un tercio de su aforo al mismo tiempo.

Automóviles. No podrán abrir los concesionarios de automóviles, aunque sí se les permitirá ofrecer tareas de reparación. Las peluquerías cerrarán y solo atenderán a domicilio.

Distancias. El personal de los negocios de alimentación y productos de primera necesidad tendrán que evitar las aglomeraciones de clientes y que estos mantengan al menos un metro de distancia.