Después de casi once años al frente de su negocio, Satvending, Mª Carmen Cousillas también tuvo que cesar su actividad. Su empresa se encuentra parada ya que los principales lugares en los que se encuentran sus máquinas expendedoras están cerrados. "La mayor parte de los clientes son colegios o polideportivos y hoy están cerrados. Hay tres o cuatro empresas con la que trabajo que están abiertas, pero la facturación es muy reducida porque perdimos el 90%". Mª Carmen insiste en que es una situación muy complicada para todos por la incertidumbre que se respira ya que "todo cambia de un día para otro". Ella es la única trabajadora de la empresa, por lo que su mayor preocupación ahora es hacer frente a los gastos. "El problema no lo tenemos ahora, sino mañana cuando tengamos que pagar todas las facturas ineludibles que vendrán. Tienes pedidos hechos con antelación, son gastos que sabes que tienes que cubrir. Y no hay ingresos". Mª Carmen considera que las ayudas que presentó el Gobierno son descafeinadas ya que los autónomos "necesitamos más". "Se nos exige mucho. Tenemos muchísimas obligaciones, pero poquísimos beneficios". Mª Carmen ve el futuro con pesimismo ya que todo parece indicar que la economía quedará "terriblemente afectada".