Depresión, estrés, insomnio o ansiedad pueden ser las consecuencias psicológicas del confinamiento, según un estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Los resultados preliminares del estudio muestran un "elevado porcentaje" de personas que sufren reacciones de ansiedad o angustia y, con menos frecuencia, problemas para dormir o síntomas depresivos.

"Queremos ver cómo evolucionan estos síntomas durante el confinamiento. Lo lógico sería que la mayoría de estas personas resuelvan estos cuadros psicológicos cuando acabe la cuarentena", señala uno de los autores del informe.