Las defunciones declaradas en los registros civiles revelan que en Galicia la mortalidad oficial por coronavirus está por debajo de las cifras reales. Según el sistema de vigilancia de la mortalidad del Instituto de Salud Carlos III, que se basa en la información de estos registros dependientes del Ministerio de Justicia, en la comunidad gallega entre el 21 de marzo y el 7 de abril hubo un 20 por ciento más de muertes respecto a la media histórica de ese mismo periodo. Es decir, perdieron la vida 310 personas más de lo que viene siendo habitual en esta época del año. Sin embargo, en ese mismo periodo solo se declararon 237 óbitos vinculados al Covid-19. Esto significa que puede haber alrededor de un 30 por ciento de decesos debidos a la pandemia que no estén dentro del recuento oficial.

En Galicia se contabilizan las defunciones en hospitales y residencias, pero no los fallecimientos que se registran en los domicilios ni tampoco aquellos óbitos de personas a las que, aunque tenían síntomas de coronavirus, nunca se les hizo una prueba para detectarlo. Aunque es solo una estimación y tiene el condicionante de que, en ocasiones, los registros civiles informan con retraso de las defunciones, permite hacerse una idea de la diferencia que hay entre los recuentos oficiales de muertos por coronavirus y las cifras reales.

En su estudio, el Instituto de Salud Carlos III analiza la mortalidad por grupos de edad. Y donde más se ha incrementado el número de defunciones sobre los valores considerados normales es entre los más mayores. Se registraron un 23,6 por ciento más de fallecimientos entre gallegos de más de 74 años. Entre los 65 y los 74 años el aumento fue mucho más moderado (de solo el 2,4 por ciento). No hubo diferencias en los decesos de personas más jóvenes.

Hubo un 25,8 por ciento más de fallecimientos entre los varones, mientras que las defunciones entre las mujeres solo crecieron un 13,3 por ciento. En comparación con otras comunidades, Galicia registra la segunda menor subida de la mortalidad por detrás de Murcia (16,7 por ciento), lo que concuerda con tener la tasa de letalidad más baja del Estado por Covid.