Cruz Roja nació hace más de siglo y medio para atender a los heridos de guerra. Curtida en echar una mano allí donde hay un desastre natural, una epidemia o un conflicto, la entidad readapta ahora su actividad „muy centrada en el día a día en ayudar a colectivos vulnerables„ a la realidad del coronavirus. A través del Plan Cruz Roja Responde frente al Covid-19 ha redoblado esfuerzos para no solo mantener la atención en sus programas habituales sino apoyar a las autoridades sanitarias y ayuntamientos en la lucha contra el coronavirus en la que ya es la "mayor movilización de recursos y personas" de su historia."La pandemia ha supuesto un impacto muy grande para toda la actividad porque trabajamos con personas con dificultades económicas y sociales y esto no hace más que agravar su situación", señala la presidenta de Cruz Roja A Coruña, Mercedes Casanova, quien deja claro a todos los usuarios que Cruz Roja sigue ahí para todo aquel que precise de su ayuda. "Nacimos para las emergencias y trabajamos todo el año para ello, ahora es el momento de demostrarlo", indica. La nueva realidad salpica a todas las áreas de trabajo.

Área de Socorros. Profesionales de Cruz Roja han colaborado en la construcción contra reloj de varios hospitales de campaña por toda España, listos para usarse cuando la red de centros sanitarios no es capaz de hacer frente a la alta demanda de pacientes que precisan ingreso. En el caso de A Coruña, la entidad "se puso a disposición del Sergas para que recurran a nosotros si es necesario", indica Casanova, quien reconoce que no han estado de modo presencial en el operativo de Expocoruña. Sin embargo, Cruz Roja sí tiene un papel relevante en el albergue para personas sin hogar habilitado en Riazor. Desde la aportación de material „repartieron hasta el día 15 un total de 144 sacos de dormir y mantas y más de medio millar de kits de higiene y limpieza a los usuarios„ hasta la atención sanitaria. "Vamos todos los días para realizar un control básico de mediciones: tensión, temperatura, etc... Además estamos en recepción para ver si entra alguien nuevo y hacer un seguimiento", explica Mercedes Casanova, quien indica que además Cruz Roja ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias su ambulancia. "Está disponible para cualquier emergencia y siempre hay un equipo de guardia por si hay que trasladar a alguien", sostiene.

Área de Salud. Hasta mediados de mes, los técnicos de Cruz Roja A Coruña realizaron más de 610 llamadas de seguimiento del estado de salud de usuarios de sus programas y en algunos casos incluso se realiza un control telemático de mediciones biomédicas (servicio que llega a 10.000 personas en toda España). A ellas hay que sumar las 8.366 llamadas realizadas por medio centenar de voluntarios coruñeses que estos días se centran en hablar con colectivos especialmente vulnerables al confinamiento como pueden ser los mayores para aclararles dudas o simplemente paliar un poco su soledad.

Área de Educación. Los programas de refuerzo escolar, que llegan a unos 3.000 alumnos de familias vulnerables en toda España y que permitían que hiciesen los deberes o repasasen contenidos en la sede de Cruz Roja, siguen activos aunque ya no puedan hacerse de forma presencial. "Nos estamos poniendo en contacto con ellos para que puedan seguir teniendo estas clases de refuerzo. Si se puede optamos por la tutoría online y estamos buscando la forma de facilitar medios para aquellos alumnos que no pueden conectarse a internet", indica Casanova. Pero además, Cruz Roja refuerza la formación para adultos sobre el coronavirus. Por el momento, casi 2.000 personas recibieron algún curso sobre el Covid-19 en A Coruña y otras 150 sobre el uso de los equipos de protección individual (EPI).

Área de Inclusión social. Las personas en riesgo de pobreza o que pertenecen a colectivos vulnerables han visto agravada su situación por la pandemia. "Tenemos inmigrantes pendientes de renovar documentos, gente que pide asilo y que ya de por sí tiene una situación compleja... hemos reforzado los acompañamientos y la asesoría jurídica sigue ahí para resolver cualquier duda o incertidumbre", indica Casanova. Y por supuesto, aquellas familias con situaciones económicas difíciles y que eran usuarias de Cruz Roja o que su nueva situación les obliga a pedir ayuda, encontrarán el apoyo que necesitan. "Ofrecemos atención psicológica y también en algunos casos se cubren las necesidades de alimentación o medicamentos. Si la persona puede salir a la calle se le da una tarjeta monedero para que pueda ir a hacer la compra y sino se le lleva directamente a casa", sostiene. Desde el inicio del plan contra el Covid-19 y el hasta el día 15, Cruz Roja A Coruña realizó 76 entregas de alimentos y medicamentos a colectivos vulnerables.

Área de Empleo. Mercedes Casanova tiene claro que el mercado laboral pospandemia no será igual al actual y por ello, desde Cruz Roja ya se preparan para los nuevos perfiles profesionales que se demandarán. "A veces tenemos la sensación de volver a la situación del 2008 y hay que triplicar los esfuerzos en este área porque el mercado va a pedir otros profesionales", indica para resaltar que sigue la "formación online, el servicio de orientación laboral y salen algunas ofertas para supermercados o limpieza".