La Guardia Civil detuvo en Vigo a un joven de 26 años acusado de estafar a diversos clientes, entre ellos dos residencias de mayores de Burgos y colectivos sanitarios, mediante la venta fraudulenta de equipos de protección individual (EPI) por más de 100.000 euros.

La investigación comenzó en marzo tras recibir sendas denuncias de los responsables de dos residencias de mayores de Burgos en las que aseguraban que habían sido víctimas de una estafa por parte de una empresa de venta en internet de productos sanitarios publicitados como protección específica contra el coronavirus. Estos centros habían realizado encargos de material sanitario por más de 3.500 euros, pero rebasado el plazo establecido de entrega ni lo habían recibido ni existía garantía de reembolso de la cantidad abonada. La Guardia Civil acumuló finalmente más de 60 denuncias interpuestas contra el mismo sitio de venta en internet.