Exportar en tiempo de virus

1. Situación actual en los mercados internacionales, problemática y barreras. Sectores más y menos perjudicados. La situación es complicada y de gran incertidumbre. No obstante, es bueno resaltar que no hay una parálisis absoluta de la actividad económica y comercial internacional ni mucho menos. Es necesario recordar que a día de hoy el 67% de todos los casos del planeta se concentran en EEUU, España, Italia, Alemania, Reino Unido, Francia y Turquía. Y hay mercados que están más abiertos que otros a la actividad económica en función de cómo el Covid-19 está afectando a los mismos. En la Cámara de Comercio de A Coruña sabemos de empresas de materiales de construcción o del sector agroalimentario que están exportando al mismo nivel que antes o incluso en algunos casos a niveles superiores.

En cuanto a las barreras, puede haber una tendencia a un mayor proteccionismo en diferentes ámbitos. Pero esta tendencia ya existía en determinados mercados antes de la irrupción del virus (como en EEUU o Reino Unido). No obstante, habrá que estar atentos a nuevas posibles barreras que puedan existir. No sólo arancelarias, sino también no arancelarias como controles de tipo físico o cierre de fronteras para evitar la libre circulación de personas.

En cuanto a los sectores más perjudicados, sin duda, el turismo y cualquier actividad presencial o que necesite un contacto físico para ser desarrolladas. También algunas industrias de ocio y culturales (otras no, como algunas audiovisuales) y en el sector agroalimentario las actividades orientadas al canal Horeca. También afecta al retail o comercio minorista. Por ejemplo, una empresa de confección que no puede vender con normalidad porque las tiendas están cerradas. Pueden ser tiendas propias, tiendas multimarca o grandes almacenes incluso. Pero, evidentemente, al estar cerrado el comercio en varios países, también se están resintiendo tanto en el ámbito de la comunidad gallega como en el conjunto de España. Por este motivo, también juega un papel clave la estrategia online.

2. Nuevas oportunidades. Hay sectores en los que se vislumbran oportunidades en internacionalización o al menos que serán menos afectados. Por ejemplo, el sector TIC en relación al ámbito del comercio electrónico y comunicaciones y servicios online. También el sector sanitario o de la salud. En el sector agroalimentario también habrá buenas opciones de salida al exterior. Además habrá oportunidades en construcción y materiales de construcción puesto que las políticas de estímulo para reactivar la economía harán que aflore mucha obra pública. En el canal contract también, ya que muchos locales o espacios interiores se tendrán que adaptar a la nueva realidad motivada por el Covid-19, que generará nuevas exigencias de seguridad.

Por áreas geográficas es difícil marcar prioridades para las empresas gallegas o coruñesas, porque depende de lo afectados que estén los países, y de lo opacos que sean a la hora de afrontar sus relaciones comerciales. También depende de cada sector, pero podemos decir que China, Japón y Corea del Sur son tres mercados que van por delante en cuanto a la incidencia del Covid-19. También los mercados del Golfo están siendo menos afectados por ahora. Y en Europa, ya hay mercados como Irlanda, Grecia o República Checa que han controlado mejor la pandemia y saldrán del letargo económico con más solvencia. En el resto del globo, persisten muchas dudas todavía. América Latina es fundamental también para nuestra inversión y exportaciones pero hay muchos países con situaciones diferentes en cuanto a la pandemia. Quizás Argentina y Uruguay parecen los que tienen la situación más controlada.

3. Estrategias para abordar los mercados exteriores en las actuales circunstancias. La venta online y el marketing online son decisivos para la empresa actual. Tanto para las firmas que ya habían apostado por ellos como las que todavía no lo han hecho. Además, una tendencia que se vislumbra como fundamental es la de intentar concentrar los proveedores y la cadena de suministros más cerca. Es decir, concentrarla en áreas geográficas más cercanas para optimizarla y para evitar problemas de suministro como hemos visto que ha pasado con algunas empresas del textil o con el material de protección sanitaria. Ello podría reforzar la actividad industrial en territorios cercanos. Otra opción importante que debemos tener en cuenta en este momento es la de preparar estrategias futuras aprovechando este parón: realizar estudios de mercado y analizar cómo abordar mercados diferentes buscando nuevos clientes y proveedores.

4. Apoyos financieros. Las Cámaras de Comercio y por supuesto la de A Coruña han sido pioneras en el ámbito de la internacionalización en España. Desde siempre hemos tenido grandes planes de apoyo al comercio exterior. Ahora mismo podemos citar algunos como Xpande Digital, InnoExport o Gestion de la marca para internacionalización, entre otros, que además de aportar una ayuda financiera, también aportan asesoramiento sobre cómo llevar a cabo una estrategia digital o cómo internacionalizar y proteger tu marca. Además, hay que resaltar la coordinación con el Igape, con quienes compartimos planes de promoción internacional para buscar mercados en el exterior como el Foexga o el Sinerxia. El Igape y el propio ICEX tienen también su oferta propia de apoyos con lo que la empresa que lo necesite estará arropada en sus desafíos de internacionalización.

5. Misiones comerciales y calendario. Es complicado avanzar un calendario. Pero nuestros planes Foexga y Sinerxia de las Cámaras de Galicia con el Igape, por ejemplo, siguen vigentes y trataremos de adaptarnos a la situación a medida que la misma se vaya desescalando. Ahora mismo hemos tenido que suspender acciones muy importantes pero contamos con reactivarlas a partir de septiembre -octubre en el mejor de los escenarios y en mercados donde se pueda como China, Japón, Corea, etc., o en enero de 2021 en el peor de los casos-. También se están vislumbrando nuevas opciones como las misiones comerciales online o incluso ferias online que no necesiten que nadie de la empresa viaje y se puedan gestionar los contactos de manera telemática mientras dure esta situación.

6. La pospandemia, nuevos hábitos y medidas de seguridad. Todo dependerá de la evolución del virus y de los daños que genere. Sí está claro que habrá protocolos y medidas de seguridad e higiene que cambiarán y afectarán a determinadas actividades. Y se generarán nuevas opciones o hábitos que pueden ser interpretados como una oportunidad para las empresas y no como un contratiempo.

Además, es necesario recordar que estamos ante la irrupción del 5G. Y de todo lo que se vislumbra que generará en el desarrollo de la industria 4.0, también lo hará para llevar mejor algunas situaciones que se generan por el Covid-19.

7. La exportación fue clave para Galicia en la superación de la crisis de 2008, ¿lo será ahora? Tiene que seguir siendo un pilar fundamental para la recuperación, al igual que lo fue después de la crisis financiera. No obstante, nuestras empresas están mucho mejor preparadas que entonces. Hay un dato significativo: las exportaciones españolas suponen en 2019 un 23,94% cuando en 2009, justo después de que comenzase la crisis, eran de sólo el 15,24%. Esto demuestra el esfuerzo realizado por las empresas y las instituciones en los últimos 10 años por internacionalizar nuestra economía. Probablemente pocas personas que lo lean pueden esperar que ese porcentaje sea superior al de los siguientes países: Reino Unido, 16,61%; Francia, 21,04%; EEUU, 7,68% o Japón 14,90%. Y no olvidemos que somos uno de los grandes países inversores del planeta.

Además, la liberalización del comercio está en el ADN de la UE, que es la que más acuerdos de libre comercio tiene en el planeta. Y como reto hay que señalar que nos quedan muchos mercados y áreas geográficas en los que mejorar nuestra presencia e imagen y hay que trabajar en esa dirección.

8. ¿Cuándo se recuperarán los niveles prepandemia? El nivel de la exportación gallega es elevadísimo. Por reflejar algunos datos: A Coruña es la quinta provincia exportadora y Pontevedra la novena, prácticamente empatada con la octava. A Coruña, por ejemplo, exportaba en 2015 por valor de 8.200 millones de euros y en 2019 por valor de 11.000. Y la tasa de cobertura de Galicia es del 112.02% en 2019 y en la provincia de A Coruña llega al 138.90%, lo que significa que exportamos bastante más de lo que importamos y tenemos una balanza comercial positiva. Pero es que hay mercados altamente desarrollados con una oferta internacional amplísima como el Reino Unido, donde nuestra tasa de cobertura es del 307,67% en 2019, lo que demuestra la fortaleza de nuestros productos y tejido empresarial de cara a la exportación. Si uno ve la diversidad de empresas gallegas que vienen con nuestra Cámara a las misiones comerciales al Reino Unido se darían cuenta del alto nivel de nuestras empresas: automoción, energía, vinos, alimentación, marketing, hábitat y contract, textil confección, etc.

Y en esos datos no figura lógicamente la exportación de servicios, donde nuestras empresas tienen mucho que decir también principalmente en los mercados americanos. Tenemos grandes sectores y actividades exportadoras.

Quizás peque de optimista pero me gusta serlo y creo que todo esto sugiere que el desafío ante el que nos pone el Covid-19 es muy importante, pero sabremos reponernos y volver a niveles anteriores en breve. A mediados de 2021 veremos cifras de exportación muy interesantes de nuevo y probablemente en 2022 hayamos recuperado el nivel de 2019 o incluso superado el mismo.

9. ¿Conseguirá Galicia diversificar mercados? En África subsahariana hay varios países creciendo a niveles óptimos (un ejemplo es Etiopía, con crecimientos sostenidos elevadísimos del PIB, a veces más del 10%, o Ghana, Senegal, etc.) y en algunas repúblicas del Cáucaso también con una presencia muy reducida por nuestra parte. También en Vietnam, Filipinas, Tailandia, India o Indonesia.

10. ¿El nuevo entorno será más propicio para las grandes empresas o para las pymes? La UE lleva tiempo avisando a España de su exceso de pymes y micropymes. Y no ha habido políticas estatales que favoreciesen la concentración empresarial. Esto lastra las opciones de internacionalización frente a países como Alemania.