El principal cambio que notarán los ciudadanos es que recuperarán la libertad de movimientos, si bien ésta no será total; por lo pronto ya es seguro que no se podrá salir de la provincia de residencia. Esta fase la comenzarán de forma experimental el 4 de mayo en Baleares y las islas canarias de El Hierro, La Gomera y La Graciosa; a partir del 11 de mayo se podrán agregar más provincias si se den las condiciones pautadas por el Ministerio de Sanidad.

El comercio podrá salir de su letargo. Así, podrá reanudarse la actividad de las pequeñas tiendas "en condiciones de estricta seguridad", no así en grandes superficies. También la restauración podrá volver a levantar la persiana: se permitirá la apertura de terrazas al 30% de su capacidad, sin afluencia de clientes en el interior. En los hoteles, se empezará a permitir su apertura excluyendo el uso de zonas comunes y con un horario preferente para mayores de 65 años.

Los lugares de culto religioso podrán abrir al público, pero con su aforo limitado a un tercio.En esta fase los usuarios podrán ir de nuevo a las peluquerías siempre que el establecimiento haya tomado medidas de seguridad e higiene.Y en cuanto al deporte profesional, habrá menos restricciones ya que se autorizará el "entrenamiento medio".