Solo un 30% del comercio tradicional abrió sus puertas ayer dentro de la fase cero del plan de desescalada del Gobierno, y un 7% de los establecimientos de hostelería, según datos de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA).
La organización de autónomos señala que la falta de información sobre las medidas de seguridad y la incertidumbre de cómo va a responder el consumidor han retrasado la apertura de miles de establecimientos que ayer ya podían abrir sus puertas. A lo largo de la semana se espera un regreso gradual, hasta llegar al 11 de mayo, donde se estima que la apertura alcance al 100% de los comercios.
El presidente de UPTA, Eduardo Abad, considera que es "necesario" que a lo largo de esta semana comiencen a funcionar la mayoría de los negocios que cumplen con los requisitos.
"Para ello, además de facilitar más información, la Administración debe suministrar a los empleadores el material necesario que exige la legislación para cumplir con los requerimientos en materia de salud laboral: mascarillas, geles, guantes, etc.", ha solicitado Abad. "Desde UPTA insistimos, deben ser las comunidades autónomas las que activen ayudas específicas para la adaptación de los establecimientos a la normativa obligatoria en esta etapa de reapertura", remarcó.
