De todo el listado de peticiones que recibió Pedro Sánchez de parte de los presidentes autonómicos, al menos tomó nota de dos que sí se comprometió a revisar. Por un lado, la prohibición de la pesca y la caza deportiva, vetada en la fase 1, y por otro, los criterios empleados para realizar el reparto de 16.000 millones de euros del fondo de reconstrucción, que no convencen a la mayoría de las comunidades.

En la orden ministerial del sábado que regula las actividades que se podrán realizan durante la fase 1 de la desescalada, la caza y la pesca recreativa figuran como vetadas, a pesar que la semana pasada la Xunta había autorizado la segunda por considerar que no acarrea ningún riesgo al tratarse de un ejercicio individual.

Ante este revés, el Ejecutivo gallego envió una carta al ministro de Sanidad, Salvador Illa, instándole a reconsiderar su postura y ayer Feijóo se lo pidió de nuevo a Pedro Sánchez en la reunión por videoconferencia. El presidente de la Xunta aseguró que el Gobierno se comprometió a revisar la prohibición con vistas a poder revocarla ya en esta fase de la desescalada.

Otra decisión que se someterá a revisión son los criterios diseñados por el Ministerio de Hacienda para distribuir entre las comunidades 16.000 millones de euros para afrontar los gatos por la crisis sanitaria. "Las discrepancias son profundas", indicó Feijóo sobre los criterios, porque "no miden de forma adecuada" el gasto sanitario efectuado por cada autonomía ni tiene en cuenta el peso de la población. Las condiciones del reparto, además, son distintas a las utilizadas en el sistema de financiación autonómica y en la distribución de otros 1.000 millones pactados hace unas semanas con Sanidad.

El malestar de las autonomías con el Gobierno por la desescalada del confinamiento no se disimuló ayer, en la novena conferencia de presidentes, celebrada en puertas de que media España pase a un régimen más relajado en la lucha contra el coronavirus. Varias comunidades, como Andalucía y Valencia, se sienten agraviadas al no haber pasado todo su territorio a la fase 1, mientras Madrid, gobernada por la conservadora Isabel Díaz Ayuso (rodeada de polémica a raíz de la dimisión de su directora de Salud Pública), critica que deba continuar en la fase 0.

La cita sirvió para que los mandatarios autonómicos transmitieran sus quejas al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, quien dio nuevas pistas sobre el fondo autonómico no reembolsable y esbozó una alternativa al estado de alarma. "Si estuvierais en mi lugar, querríais levantar cuanto antes el estado de alarma. Vamos a plantear a los grupos parlamentarios, cuando hayamos controlado la epidemia, una fórmula de gobernanza que llevará implícita la modificación de leyes. Un acuerdo de gobernanza donde estéis vosotros y nosotros", dijo el presidente del Gobierno, según fuentes presentes en la cita telemática.

Sánchez citó la Ley de salud pública, del 2011, y la Ley de sanidad, de 1986, entre las normas cuya modificación estudia. Pero también advirtió: "Ahora el instrumento que tenemos es el que tenemos".

La Moncloa quiere mantener el estado de alarma al menos un mes y medio más, objetivo que conlleva solicitar otras dos prórrogas de 15 días, ya que la actual expira el próximo 24 de mayo. Esta extensión fue aprobada el pasado miércoles por el Congreso con algunas dificultades, gracias al apoyo de Ciudadanos y el PNV.