Fotografiar el impacto de la pandemia de Covid-19 en los enfermos con párkinson y su entorno es el objetivo principal de un estudio que acaba de poner en marcha la Fundación Curemos el Párkinson, junto con la Asociación Párkinson Galicia-A Coruña y el Observatorio Párkinson de la Federación Española de Párkinson (FEP). El proyecto, coordinado por el neurólogo del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) Diego Santos García, cuenta con el aval científico de la Sociedad Española de Neurología (SEN) y su Grupo de Trastornos del Movimiento”, y aspira ser respaldado con la participación de un millar de enfermos y familiares de todo el país.

"Desde el inicio de la pandemia, los neurólogos estamos preocupados por todos nuestros pacientes, y en concreto, por los afectados por el párkinson. Sobre todo, porque se trata de enfermos con una dolencia crónica degenerativa y, al tener que estar en casa, puede que hayan dejado de hacer ciertas terapias, con el consiguiente perjuicio que eso supondría. Además, creemos que el confinamiento ha podido empeorar también su estado desde el punto de vista emocional. La idea de este estudio es constatar el impacto de la actual crisis sanitaria en estos enfermos", explica el doctor Santos, vicepresidente de la Fundación Curemos el Párkinson, quien especifica que el estudio Covid&Parkinson se llevará a cabo mediante una encuesta online anónima y voluntaria a la que los enfermos o sus familiares accederán a través de la web y redes sociales de esa entidad, de la Asociación Párkinson Galicia-Coruña y del Observatorio Párkinson de la FEP.

"Apenas hay información sobre el impacto que está teniendo la Covid-19 en los afectados por la enfermedad de Parkinson. Las pocas publicaciones disponibles se basan en cartas de opinión o recomendaciones, pero no contamos con datos actuales sobre cómo está afectando la pandemia a a este grupo de enfermos", sostiene el neurólogo del Chuac. Tampoco se sabe si la patología provocada por el SARS-CoV-2 es más frecuente o grave en estos pacientes. La investigación que acaban de iniciar recogerá información acerca del número de casos positivos y de fallecidos, así como la relación de la enfermedad de Parkinson con el riesgo de sufrir una a infección y/o morir por Covid-19, entre otros datos.

"La situación actual genera que los enfermos no puedan acudir a las terapias de rehabilitación necesarias para su mejora, lo que podría provocar una mayor aparición de los síntomas y un menor control de los mismos. Además, el confinamiento puede generar soledad y afectar a su salud psicológica y emocional. Para dar respuesta a esta y otras necesidades del colectivo, es necesario contar con estos datos", concluye el especialista.