El Ministerio de Consumo desaconseja el uso de mascarillas tipo FFP2 en la población general y recordó que estas solo están recomendadas para profesionales en contacto con el virus y colectivos vulnerables bajo prescripción médica.

Para la población general, el departamento que dirige Alberto Garzón sugiere el uso de las mascarillas higiénicas en el caso de las personas sanas y sin contacto con el Covid-19 y de las quirúrgicas para las personas que hayan resultado contagiadas, tengan síntomas o sean positivas asintomáticas.

Consumo se apoya en las recomendaciones de la comunidad científica y advierten, en todo caso, que no se debe renunciar a medidas como el distanciamiento físico y la higiene. El tercer grupo de mascarillas, las tipo EPI (equipo de protección individual), entre las que se encuentran las FFP2, están recomendadas solamente para personas en contacto con el virus y para grupos vulnerables, siempre bajo la prescripción médica correspondiente.

Este tipo de mascarillas, que la Comunidad de Madrid está distribuyendo gratuitamente en las farmacias, pueden dificultar la respiración más que las mascarillas higiénicas o quirúrgicas, "por lo que personal no especializado puede tender a tocarlas y recolocarlas, con el consiguiente riesgo de contaminación", advierten.