El Gobierno italiano aprobó un nuevo paquete de estímulos por valor de 55.000 millones de euros, el mayor de su historia, que incluye subvenciones a fondo perdido para pymes, prestaciones a autónomos e incentivos al turismo para paliar el impacto de la crisis del coronavirus.

El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, compareció en una rueda de prensa telemática y explicó que se trata de un paquete ambicioso, dirigido a "relanzar y apoyar la recuperación económica y social del país" en una situación de extrema dificultad derivada de la crisis de el Covid-19.

Italia, la tercera economía de la eurozona, sufrirá este año una contracción de su economía del 8 % según los cálculos del Gobierno nacional como consecuencia de los efectos de la pandemia del coronavirus y las medidas de confinamiento aplicadas para contenerla, que han interrumpido semanas las actividades productivas y ha puesto en aprietos a empresas y familias.

Para amortiguar estos efectos, el Gobierno italiano ha aprobado un decreto con ayudas de hasta 55.000 millones, que se suma al paquete de hasta 25.000 millones impulsado en marzo y que va dirigido sobre todo a sostener a empresas, familias, autónomos y al sector turismo.

Estos 55.000 millones tratarán de aliviar el tejido económico, pero dispararán el déficit italiano hasta el 10,4 % en 2020, según los pronósticos del Ejecutivo.

De ese nuevo paquete de incentivos, casi la mitad, 26.000 millones, se destinan a ampliar el paro temporal. Otros 15.000 millones serán para ayudas a las empresas

Hay además 4.000 millones para financiar al sector turístico, de los que la mitad serán para que adecuar las instalaciones a la situación de emergencia sanitaria. En este apartado se incluyen además bonos de 500 euros para las familias con ingresos inferiores a los 40.000 euros anuales para gastar hasta final de año en hoteles y albergues de Italia.