Los habitantes de la parroquia de Cea (Vilagarcía de Arousa) viven desde la noche del pasado domingo una situación rocambolesca con masiva presencia policial, mediadores, bomberos y hasta cámaras de televisión, ante la actitud de uno de sus vecinos, un individuo de 44 años y con antecedentes, que se atrincheró en su casa tras una discusión familiar, y amenazó con disparar una escopeta, y también con volar la vivienda, si alguien intentaba hacerlo salir por la fuerza.

El hombre continuó durante la jornada de ayer con su actitud, ya que no consiguieron hacerle entrar en razones ni el mediador policial, ni el abogado de la familia, ni sus padres, con los que no mantiene una buena relación y habría tenido una discusión.

Para entrar en el domicilio, la Policía necesitaba una orden judicial que no obtuvo, ya que el juez de guardia entendió que el encierro del individuo no suponía un peligro ni para él (que quedó atrincherado en la planta superior de la casa) ni para sus padres que viven en la planta baja. Este vecino salió de prisión hace aproximadamente dos meses. Cumplió condena por agredir a su padre con un cuchillo. En la actualidad tiene asuntos judiciales pendientes con su expareja, con la que tiene un niño. Al parecer la mujer había amenazado con volver a denunciarlo, y el domingo pretendían notificarle una nueva citación. La presencia policial avivó su miedo a volver a la cárcel y comenzó una discusión con sus padres que lo llevó a atrincherarse en la planta superior de la casa.

La Policía volvió al domicilio, y también fue requerida la presencia de los bomberos, en un primer momento para que abrieran la puerta de la vivienda en la que se encontraba atrincherado y de la que no quería salir. Pero la presencia uniformada alteró más al hombre que primero amenazó con disparar y luego con quemar la casa si alguien entraba a la fuerza. Se pidieron entonces los refuerzos del GOES (grupos operativos especiales de seguridad) que también se retiraron al no tener orden judicial y de un mediador. Ni éste ni el abogado de la familia consiguieron que saliese e incluso amenazó con suicidarse.