La pandemia por coronavirus no ha paralizado la actividad de trasplantes. Desde mediados de marzo, cuando se decretó el estado de alarma, se realizaron un total de 38 intervenciones de este tipo en Galicia, la mayoría en el Hospital Universitario de A Coruña, según informó ayer la Axencia de Doazón de Órganos e Sangue con motivo del Día Nacional del Donante, una figura clave sin la que sería imposible salvar miles de vidas todos los años. Solo en Galicia hubo 44 donantes de órganos o tejidos en lo que va de año.

Pese a que entre enero y el 13 de marzo el número de trasplantes había aumentado un 22% en la comunidad respecto al mismo periodo de 2019, la pandemia hizo que la actividad se ralentizase -bajaron los fallecimientos por infarto, ictus o accidentes de tráfico y por tanto los posibles donantes- aunque no paró en ningún momento. En el caso del Hospital de A Coruña se realizaron al menos 23 operaciones de este tipo en plena pandemia: siete en marzo, cuatro en abril -cuando se vivía el pico de afectados por coronavirus- y otros doce hasta el 11 de mayo. Una cifra que sube hasta los 85 desde que comenzó el año: 34 de riñón, 22 de hígado, 17 de pulmón y doce de corazón, según informaron ayer desde la gerencia del centro coruñés, donde además tuvieron 17 donantes este 2020, cuatro en vivo.

Desde la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) quisieron ayer reconocer la figura del donante de órganos y recordaron que existe la posibilidad de ayudar en vida a enfermos que precisan un trasplante. España registró un total de 2.463 donantes en vida de riñón entre 2010 y 2017, el 60% mujeres. La gran mayoría (un 33%) realiza la donación a su pareja, seguido de quien lo hace a sus padres o a algún hermano. Pero desde la ONT recuerdan que también es posible ser donante en vida para un desconocido, es lo que se conoce como la figura del buen samaritano y que se incluye en el Programa Español de Trasplante Renal Cruzado. En la última década 221 personas se han interesado por donar de este modo y finalmente, tras la evaluación médica y psicosocial, 18 pudieron hacerlo y permitieron que se produjesen 55 trasplantes de riñón.

La ONT recordó ayer también que antes de decretarse el estado de alarma se realizó en España el primer trasplante renal cruzado con Portugal y el tercero desde que se inició la internacionalización del programa. En él participaron la Fundación Puigvert de Barcelona y el Centro Hospitalario Universitário de Oporto.