El índice de transmisión del coronavirus en niños y en adultos es similar, pero los más pequeños presentan casi siempre cuadros clínicos muy leves o son asintomáticos, según los primeros resultados del estudio Kids Corona del Hospital Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat (Barcelona). Esta es una de las principales conclusiones presentadas ayer por el equipo del hospital que ha estudiado 411 familias con hijos donde uno de los progenitores estaba contagiado y que ha encontrado que un 17,5 % de los niños y un 18,9 % de los adultos convivientes se han infectado.

Sin embargo, de los 724 niños infectados estudiados, la mitad no presentó ningún síntoma, la otra mitad desarrolló un cuadro clínico muy leve, con una pequeña tos o fiebre autolimitada, y solo uno requirió ingreso hospitalario.

A la espera de más resultado que permitan saber por qué los niños parecen estar más protegidos frente al virus, ahora el equipo científico ha diseñado un segundo estudio que llevará a cabo este verano en casals y campamentos de verano de Barcelona para comprobar cómo transmiten el virus los más pequeños. "Desde el hospital somos conscientes de que existe una necesidad científica y social de conocer datos, es decir, que todas aquellas decisiones que tomemos en esta época que nos toca convivir con la Covid-19 estén basados en datos y podamos tomar decisiones de forma más adecuada", ha explicado el jefe de Pediatría, Juanjo García, al justificar por qué se presentaban estos datos preliminares.

Este estudio, que se ha llevado a cabo en los domicilios de las familias, coincide con los datos del mismo hospital, donde desde que empezó la pandemia solo han hospitalizado a 34 niños, 6 de ellos en la UCI, y se ha registrado un fallecimiento de un niño con otras patologías graves.

Además de comprobar si los niños se contagiaban de la misma forma que los adultos, una de las preguntas que se planteaba el estudio era si también transmitían el virus de la misma forma. Para ello, con las pruebas de PCR, los investigadores analizaron la presencia de virus en la nasofaringe, que indicaría la capacidad de contagiar a terceros, y vieron que el 33,8 % de los adultos y un 11,9 % de los niños todavía presentaban carga viral un mes después de que se hubiera dado el primer caso de coronavirus en casa, aunque en una cantidad muy baja.