Las orquestas, pilar fundamental de las verbenas gallegas, se muestran cautas con el anuncio de la Xunta de que podrán retomar su actividad a partir del 1 de julio. Pese a que muchas ya tenían el espectáculo de este año prácticamente montado cuando se decretó el estado de alarma - y solo necesitarían unos días o semanas para ultimar detalles y ensayos antes de subirse de nuevo al escenario, algo que como mucho podría demorarse hasta mediados de julio-, reconocen que están a la espera de conocer el protocolo de la Xunta que marque las directrices en materia de seguridad sanitaria que hay que cumplir tanto encima del palco como en el campo de la fiesta.

"Hay que ver en qué condiciones se van a poder desarrollar las verbenas", explica José San Millán, responsable de La Fórmula y La Resistencia, quien reconoce cierta incertidumbre en el sector ya que muchos ayuntamientos "ya han suspendido fiestas de agosto o septiembre por miedo a rebrotes". Desde la orquesta París de Noia aseguran también que la pelota está ahora en el tejado de los concellos. "Una vez que se conozcan los protocolos sanitarios tienen que valorarlo los ayuntamientos", sostiene José Antonio Blas Piñón. Para otras agrupaciones, sin embargo, el protocolo va a determinar que salgan de gira este verano o no. "Para las orquestas de mayor tamaño, que vivimos de las grandes concentraciones de gente, creo que va a ser complicado pero habrá que analizar el protocolo, ver las fechas que quedan en pie y ver si compensa", sostiene Lito Garrido.

El inicio de la pandemia y el confinamiento obligado de la población pilló a gran parte de las orquestas gallegas con los deberes hechos. Además, la mayoría de los músicos mantuvo los ensayos individuales en sus domicilios, lo que facilitará que vuelvan a los escenarios en cuanto sea posible. "Ya habíamos tenido varias actuaciones, pero marzo y abril es cuando ultimamos la escenografía, el repertorio o el vestuario", indica Blas Piñón, quien reconoce que además los integrantes de París de Noia están en ERTE y por tanto, hasta finales de junio no podrán retomar los ensayos. "El 1 de julio no podríamos volver pero hemos trabajado todos en casa y con un par de semanas para prepararnos y ensayar, a mediados de julio ya podríamos retomar, indica. Lo mismo ocurre con varias de las orquestas del grupo San Millán. "Estamos preparados para salir porque nunca renunciamos a la temporada y los montajes estaban casi preparados", indica José San Millán. El confinamiento pilló a la orquesta Panorama a solo 15 días de iniciar una temporada que ahora puede estar en el aire. "Teníamos todo preparado: el diseño de escenario, el atrezzo, la ropa...", indica Garrido, quien reconoce que ahora no pueden "tirar" todo ese trabajo ni ofrecer "otro espectáculo".

Garrido se muestra optimista por la decisión de que haya verbenas - "no solo son las orquestas, son los feriantes, los bares..."- pero reconoce que las orquestas grandes "lo tendrán más complicado" porque precisamente son el reclamo para lograr grandes aglomeraciones de gente, justo lo contrario de lo que se busca ahora. "Pero apoyamos que se retome la actividad con medidas de seguridad y que al menos las orquestas pequeñas puedan trabajar, que en lugar de 100 haya 50 afectados", indica. El aforo también preocupa en La Fórmula. "Está claro que no se permitirán grandes concentraciones pero el 75% de las verbenas en Galicia son en pueblos pequeños", indica San Millán, quien se muestra optimista y cree que "poco a poco se retomará la actividad". "No se sabe si realmente habrá aglomeraciones porque hay miedo. Confío en que se tomen las medidas de adecuadas y se pueda reactivar la actividad porque para el sector esto fue un palo muy gordo", añade Piñón.