El informe en el que Oxfam Intermón advierte de que la crisis provocada por el coronavirus SARS-CoV-2 podría arrastrar a la pobreza a más de 44.000 gallegos llega apenas quince días después de que Cáritas alertase de que el estado de alarma empujó a más de mil familias coruñesas a recurrir por primera vez a sus servicios en busca de ayuda. Según los datos facilitados a este diario por la directora de Cáritas Interparroquial de A Coruña, Pilar Farjas, desde el inicio de la pandemia se triplicaron las ayudas de emergencia social, fundamentalmente para comida, productos de higiene y pago de alquiler, con respecto a los dos primeros meses y medio del año. Además, el valor de los alimentos entregados en el economato de la organización -"se reparten mediante vales, pero nosotros hacemos una estimación del precio, que en tienda siempre sería mayor", puntualizó Farjas- se disparó hasta los 136.359 euros entre el 16 de marzo y el 23 de mayo. Entre el 1 de enero al 15 de marzo, el importe de esa factura solidaria ascendió a 42.526 euros. Algo menos de la tercera parte.

Las dos actividades que centraron la labor de Cáritas Interparroquial de A Coruña y que la entidad reforzó desde el inicio de la emergencia sanitaria fueron, por un lado, los servicios de atención primaria -las ayudas de emergencia- y, por otro, los economatos.

Farjas explicó que la gran diferencia de la crisis provocada por la paralización de la actividad a causa de la pandemia de SARS-CoV-2 con respecto a anteriores periodos de recesión económica es que "ha sido más abrupta". "Lo vimos desde el primer día, porque la primera semana fue, con mucha diferencia, la más dura. A la desazón o la angustia de no tener recursos se sumaba el miedo. En primera línea fue muy evidente, porque en nuestro economato vivimos una situación parecida a lo que sucedió en los supermercados al inicio del confinamiento", aseguró.