Dos de cada diez individuos sanos sin exposición previa al nuevo coronavirus albergan células T reactivas al SARS-CoV-2. Esto posiblemente indica que dichas células pueden reaccionar de manera cruzada al virus debido a una infección anterior con coronavirus relacionados que causan síntomas de resfriado común. Esta idea la sugiere un nuevo estudio de las células T de 10 pacientes Covid-19 que están en tratamiento de cuidados intensivos.

Investigadores del Instituto de Inmunología de La Jolla en California (Estados Unidos) documentaron, en mayo, una importante reactividad cruzada en individuos no expuestos al virus, sugiriendo que las personas que han pasado un resfriado provocado por otros tipos de coronavirus también podrían tener protección contra el Covid-19.

Además, este nuevo trabajo ha hallado que los pacientes que sufren de síntomas respiratorios graves como resultado de la infección por SARS-CoV-2 pueden generar rápidamente células T que atacan al virus, y pueden aumentar esta producción con el tiempo.

En conjunto, estos nuevos datos abordan la pregunta mal entendida de si las respuestas de las células T específicas del SARS-CoV-2 varían en los pacientes a lo largo del tiempo dependiendo de la gravedad de la enfermedad, y ayudan a responder si los pacientes con síntomas más graves pueden generar células T protectoras específicas.

El estudio también proporciona nuevas pistas sobre las células responsables de las respuestas inmunitarias excesivas.