La Xunta, Universidade de Santiago de Compostela y las empresas operadoras de agua firmaron ayer un convenio para desarrollar un proyecto en el que las depuradoras de aguas se convertirán en sistemas de vigilancia para detectar la presencia de Covid-19 y prevenir rebrotes.

La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, indicó que, gracias a recientes investigaciones científicas, se sabe que las aguas residuales contienen restos del coronavirus hasta una semana antes de que aparezcan sus síntomas entre la población afectada. Por ello, subrayó la importancia de crear un sistema de alerta tomando como referencia las muestras analíticas de aguas residuales.