Con unos 225.000 contagios y algo más de 3.600 muertos, Sudáfrica se ha afianzado como uno de los grandes focos mundiales de la pandemia de Covid-19, especialmente debido al aumento desmesurado de casos en Johannesburgo y Pretoria. Sudáfrica acumula cuatro de cada diez infecciones registradas en África, pese a no suponer ni el 5 % de su población total. Además, a nivel global es el quinto país con más casos activos a la vez (unos 114.000).