El ministro de Sanidad, Salvador Illa, avisó ayer de que actualmente en España hay 201 brotes activos en España, con 2.289 casos asociados a trabajos de temporeros y a actividades de ocio o donde no se cumplen las medidas de higiene y distanciamiento físico. Aunque la mayoría de estos brotes están "controlados", o en fase de estarlo, Illa reconoció que los que más preocupan son los de Cataluña y Aragón, por lo que ha llamado a la sociedad a "extremar" la precaución con el nuevo coronavirus.

"Tienen que respetar con rigor las medidas aplicadas por las comunidades autónomas", dijo el ministro de Sanidad, tras destacar la "correcta coordinación" que está manteniendo el Ministerio de Sanidad con las autonomías y los ayuntamientos, las cuales están tomando las "medidas adecuadas" para controlar los brotes.

Finalmente, Illa reiteró la importancia de que los ciudadanos cumplan con las medidas de higiene de manos, uso de mascarillas y distanciamiento físico. "Ahí donde se están relajando las medidas, es donde se están produciendo los brotes. No hay que tener miedo al virus pero no hay que perderle el respeto. Hay que extremar también la prudencia en el ámbito familiar", subrayó el ministro.

En este sentido, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, recordó que el rastreo de contactos es "esencial" para encontrar y aislar los casos e identificar y poner en cuarentena sus contactos. "Las aplicaciones móviles pueden apoyar el rastreo de contactos, pero nada reemplaza a las botas en el suelo: trabajadores entrenados yendo de puerta en puerta para encontrar casos y contactos, y romper las cadenas de transmisión. El rastreo de contactos es esencial para cada país, en cada situación. Puede evitar que los casos individuales se conviertan en grupos, y que los grupos se conviertan en una transmisión comunitaria", añadió.

Tedros indicó que reaccionar rápidamente a los nuevos casos y grupos de Covid-19 "permitirá a los países continuar en el camino de la recuperación económica, mientras se mantiene el virus a raya. El rastreo de contactos no es la única herramienta, debe ser parte de un paquete completo. Pero es una de las más importantes", insistió.

Así que España toma nota y durante la jornada de ayer se tomaron decisiones importantes a la hora de tratar de frenar la propagación del coronavirus. Concretamente, el Gobierno murciano prohibió desde ayer la apertura de locales de ocio nocturno, que solo se permitirá en terrazas y exteriores con todos los clientes sentados, al tiempo que ha limitado a un máximo de 15 personas las que se pueden reunir para eventos de toda índole, sean públicos o privados.

La decisión se tomó tras detectarse un aumento de casos constante en los últimos días, relacionados con el brote surgido hace un mes a raíz de tres personas contagiadas que llegaron a la comunidad autónoma desde Bolivia.

El Gobierno de Navarra también limitará el horario de cierre de los establecimientos de ocio nocturno y lo equiparará al del resto de bares y restaurantes (hasta las dos) y reducirá a diez el número máximo de personas en grupos durante la madrugada para evitar aglomeraciones al cerrar esos locales.

Será mañana cuando se regularán estas medidas, según avanzó en rueda de prensa la consejera de Salud, Santos Induráin, quien ha apuntado que entrarán en vigor una vez publicadas en el Boletín Oficial de Navarra.

Estas medidas se adoptan ante los datos epidemiológicos registrados en las últimas semanas, con brotes vinculados al ámbito social y al ocio nocturno. La consejera habló de un "equilibrio complejo" puesto que hay que preservar la salud pública y la vida económica y social y, en ese sentido, señaló que la estrategia es la de no llevar a cabo retrocesos indiscriminados que penalicen a toda la sociedad, incluyendo a la mayoría de las personas que cumplen, ni tampoco al tejido económico.

Lo que se estudia, indicó son actuaciones "selectivas, graduales, proporcionadas, consistentes y coherentes, consultadas y participadas".

También, como medida preventiva, el Instituto foral de Bienestar Social de Álava decidió mantener abiertos dos centros de día para mayores para atender a casos con necesidades urgentes, tras el cierre del resto por orden del Gobierno Vasco.

En un comunicado, la Diputación explicó que el cierre es una medida de carácter temporal que en principio se extenderá hasta finales de semana, con posibilidad de ampliación, en función de la evolución del coronavirus.