La palabra cuarentena proviene etimológicamente de la italiana quaranta giorni, derivada a su vez del latín quadraginta, que significa "cuatro veces diez". En sentido médico empezó a utilizarse en el siglo XIV en Venecia con el aislamiento de 40 días que se hacía pasar a las personas y bienes sospechosos de portar la peste bubónica durante la pandemia de la peste negra. Desde entonces se llama cuarentena al aislamiento preventivo a que se somete durante un período de tiempo, por razones sanitarias, a personas o animales.

Los confinamientos han vuelto de la mano del coronavirus y se extienden por todo el planeta. Precisamente la primera cuarentena se decretó el pasado mes de enero en la ciudad china de Wuhan, donde nació la pandemia. Poco se sabía del Covid-19, un virus nuevo sobre el que los científicos de todo el mundo van aprendiendo según pasa el tiempo y pueden estudiarlo.

Inicialmente la cuarentena para quienes tuvieran un contacto directo con alguien contagiado de Covid-19 se fijó en 14 días de aislamiento en domicilio, decisión que en su día respaldó la Organización Mundial de la Salud. Curiosamente, ya en aquel momento y en España, el Ministerio de Sanidad fijaba en solo 7 días el confinamiento para el personal sociosanitario. El impacto individual y social del aislamiento, así como la repercusión económica, son muy elevados, y según se va conociendo el nuevo virus parece que los días de cuarentena pueden reducirse.

El Centro para el Control de Enfermedades infecciosas de EEUU emitió en julio un comunicado en el que señalaba que consideraba suficiente la cuarentena de 10 días. Tras esto, científicos de numerosos países coincidieron en señalar que 14 o 15 días parecía excesivo porque a partir del décimo día la gente ya no es infecciosa.

"No es necesario hacer 14 días de cuarentena siempre que se cumpla con unas condiciones previas. Si a los 10 días se tiene una PCR negativa, se puede parar la cuarentena. Si llevas tres días de cuarentena y se hace una prueba PCR negativa, ya no es necesario continuar con el aislamiento", avanzaba la semana pasada Fernando Simón.

El director del Centro de Emergencias y Alertas Sanitarias admitía que en España se debatía "la posibilidad de dejar de forma inequívoca la cuarentena en 10 días y olvidarnos ya de los 14 días". La medida, señaló, estaba avalada porque las últimas evidencias científicas confirman que la carga viral del décimo día sería prácticamente irrelevante.

El Ministerio de Sanidad aprobó ayer la medida, que hace innecesaria una prueba PCR negativa a los 10 días, tras un encuentro con los representantes de las comunidades autónomas, que mostraron su apoyo de forma unánime. Cataluña se adelantó y aprobó la medida por la mañana, si bien ya no entrará en vigor hasta la próxima semana. La comisión de Salud Pública también aprobó incorporar los nuevos test antigénicos para detectar el Covid-19.

La mayoría de los países europeos han adoptado ya los 10 días de cuarentena, excepto Francia, que los ha rebajado a 7. El primer ministro francés, Jean Castex, tomó la decisión por consejo de los asesores científicos, pues el periodo de 7 días "es el de verdadero riesgo de contagio". En sentido similar se pronuncia Christian Drosten, uno de los virólogos de mayor prestigio de Alemania, que afirma que las personas no son contagiosas pasados cinco días de la aparición de síntomas.

Pero ¿qué dice la Organización Mundial de la Salud al respecto? Hans Kluge, director regional para Europa de la OMS, reconoce que la cuarentena de 14 días es una medida "conservadora" y aconseja a los países europeos analizar científicamente nuevas opciones que sean "seguras": "El período de cuarentena de 14 días es una estimación conservadora del período infeccioso, que, a pesar de cierta incertidumbre, cubre el período, antes y después de que aparezcan los síntomas, cuando las personas pueden ser infecciosas".

El epidemiólogo gallego Juan Gestal explica que el tope de 14 días del período de incubación del Covid-19 se adoptó en base al SARS. "Las propuestas de reducción se han hecho para tratar de conseguir un mejor cumplimiento de las cuarentenas. Reducirlo de 14 a 10 días es algo que había propuesto la OMS hace tiempo. También en los casos con clínica suspender la cuarentena tras tres días sin clínica y una PCR negativa", expone el epidemiólogo.

Juan Gestal apunta que la medida se fundamenta "por una parte, en que el período medio de incubación son 5-6 días y después de 7 días solo desarrollan la enfermedad un porcentaje muy bajo de personas y, por otra parte, en que la carga viral es máxima al inicio de la clínica o incluso un día antes, descendiendo rápidamente en una semana no siendo ya contagiosos a partir de los 5-7 días. Con una PCR negativa a los 7 días habría una gran seguridad y se lograría un mayor cumplimiento de la cuarentena. Esto es lo que aprobó Francia".